Unión Europea contribuyo a desterrar la pobreza en la Selva

Angeles Mariscal.

Tuxtla Gutiérrez, Chis., 27 de agosto. Tres años y medio de trabajo y una inversión de 435 millones de pesos, la mitad de ellos proporcionados por la Unión Europea, lograron sacar a unas 8 mil 400 familias de la selva de esta entidad de la línea de pobreza alimentaria, dieron a conocer este día los operadores del Programa Integral para el Desarrollo Sustentable de la Selva (Prodesis).
El proyecto fue creado a finales de 2003, con el propósito de amortizar la presión sobre los recursos naturales de la Selva Lacandona por parte de los grupos que habitan la región. A pocos meses de que culmine el plan, representantes de las distintas secretarías del gobierno estatal y los operadores del mismo reconocieron que los posibles logros en las comunidades de la selva, fueron más de carácter cualitativo que cuantitativo.
“La pobreza es un asunto estructural donde inciden varios factores, sin embargo se puede decir que el 28 por ciento de las familias que participaron en el programa, han mejorado su nivel de ingresos y lograron salir de la línea de pobreza alimentaria. Aún falta incidir en su capacidad de desarrollo y en su mejora patromonial”, sostuvo María Cruz, secretaria de Desarrollo Social del estado.
Explicó la funcionaria que el impacto del Prodesis fue en 16 microregiones ubicadas en Ocosingo, Las Margaritas, Maravilla Tenejapa, Marqués de Comillas, Benemérito de Las Américas, La trinitaria y La Independencia, con participación directa de unas 150 mil personas.
María Cruz y Mauro Valle Santiago, director de El Observatorio, órgano encargado de la evaluación y monitoreo del programa, reconocieron que no han logrado impactar de manera generalizada en las comunidades de la selva.
Los programas que se apoyaron con recursos del Prodesis fueron desde la conformación de una embotelladora de agua, hasta sistemas agropastoriles, artesanía textil, centros ecoturísticos, viveros, sistemas de riego, y plantaciones de productos orgánicos como café, cacao y plátano.
Entre los logros de carácter cualitativo que los operadores del programa consideran haber logrado en las comunidades de la selva, se ubica el desarrollo de capacidades autogestivas, la conformación de microempresas, la entrada a mercados de calidad, y la colectivización de los recursos obtenidos. Para favorecer estos proyectos se contrataron 34 consultorías de asistencia técnica, la mayoría de ellas internacionales.
“2007 es el año más importante en términos de ejecución de recursos, en abril de 2008 se concluirá la ejecución de proyectos pero desde este momento entramos en el proceso de evaluaciones, cierre administrativo y auditorias”, explicó María Cruz.
La funcionaria refirió que la experiencia en el desarrollo de las habilidades autogestivas logras en la selva, se podrían extender a la región indígena chol y zoque, particularmente a los municipios de menos desarrollo.
Desde su creación este programa fue cuestionado por organismo no gubernamentales y algunas de las comunidades de la selva. Por ejemplo el Centro de Investigaciones Económicas y Políticas (CIEPAC) elaboró en 2006 un análisis donde sostiene que el prodesis podría “favorecer situaciones de conflicto y de división, así como generar situaciones que favorezcan operaciones de contrainsurgencia”.
“Desplegar este programa en una zona de alta conflictividad, con diálogos de paz suspendidos, con fuerte presencia militar, con una aguda problemática social y con el financiamiento de proyectos de desarrollo decididos con la oposición de una parte consistente de la población y sin la participación amplia, inevitablemente produce polarización política y nueva conflictividad.
Otros actores como los médicos y parteras organizados en los Altos y la Selva ha cuestionado dicho proyecto por la supuesta llegada de científicos que solo vienen a robar los conocimientos ancestrales de herbolaria para comercializar medicinas después a un alto costo.