La libertad religiosa “es letra muerta”.
Manuel de los Santos.
La Trinitaria, Chis; 20 de agosto.- Evangélicos de la comunidad Santa Rita
denunciaron que los caciques católicos acercaron la persecución en su contra desde hace varios días y el lunes que dio inicio el ciclo escolar, no permitieron a los niños a ingresar a los planteles educativos.
Lejos de cesar el hostigamiento como presumió el subsecretario de Asuntos Religiosos, Jorge Lanz Garrido, los evangélicos tienen su versión y denunciaron que los caciques incrementaron la persecución en su contra en las últimas horas.
Por lo mismo, las ocho familias, que hace un total de 30 personas denunciaron que en Santa Rita existe un clima de inseguridad y zozobra, todo porque los caciques se sienten “intocables” por parte de la Fiscalía estatal.
La libertad religiosa en esa comunidad “es letra muerta” y por lo mismo clamaron al gobernador Juan Sabines Guerrero, que cumpla con el mandato de “Hechos no palabras”.
Durante dos años y cinco meses, los caciques católicos han sufrido fuertes presiones para que renuncien a su creencia y se sumen a festividad de Santa Rita, que se venera en la localidad ubicada a unos diez kilómetros de la cabecera de La Trinitaria.
En este lapso, los caciques despojaron a los miembros de la Iglesia Asamblea de Dios, de sus solares, prohibieron a los habitantes que compren en las tiendas y ahora se sumó el impedimento para que más de una docena de niños asistan a la escuela primaria.
Desde el inicio de la persecución religiosa, los 30 evangélicos interpusieron tres averiguaciones previas en la Fiscalía, por delitos de robo con violencia, daños intencionados y despojo, pero estas no les han dado trámite y consignado a un juez.
Demandas en la Fiscalía
Estas son la AL08/028/2005 por robo con violencia en contra de Gloria Gladis Aguilar Aguilar; la AL08/030/2005, por despojo en contra de Pablo Roselín Gómez, Federico Hernández Aguilar, Adán Aguilar Pérez, Rigoberto Aguilar Pérez y Caralampio Aguilar Aguilar; y la AI08/065/2005 por daños intencionales y asociación delictuosa en contra de José Alfredo Aguilar Pérez, Adán Aguilar Pérez, Rigoberto Aguilar Pérez, Fredy Pablo Roselín Cruz Gómez y Humberto García Aguilar.
El pastor de la iglesia, Adán Aguilar Pérez acusó a los caciques católicos Valdemar Aguilar Vázquez, Ricardo Hernández López, Jesús Aguilar Torres y Ricardo Hernández Calvo, de encabezar las acciones en su contra.
Pese a que en días pasados los evangélicos aceptaron sostener una reunión con los católicos, en la cabecera municipal de La Trinitaria, donde incluso se firmó un documento de buena intensión, los primeros no lo respetaron y continuaron con la persecución.
Ahí el gobierno pidió a los evangélicos que desistieran de la acción penal, pero ellos aseguran que los delitos cometidos “no pueden ser negociables”.
Aguilar Pérez cree que los católicos se sienten protegidos por el gobierno porque dos años y medio después ninguno de los agresores ha sido detenido y consignado ante las autoridades.
Aumenta intolerancia
Debido a que los católicos se sienten “protegidos”, el hostigamiento se extendió hacia los miembros de la iglesia “Testigos de Jehová” y en días pasado uno de los miembros de esta denominación ya fue despojado de un terreno, de un solar y a otro del destruyeron galeras y cercas.
La persecución, aclaró, no es solo contra nosotros, pues el hostigamiento se extendió hacia los Testigos de Jehová, a uno lo despojaron de sus terrenos, solares y a otro le destruyeron sus galeras y cercas, la libertad religiosa es letra muerta, dijo el pastor Aguilar Pérez.
Los evangélicos anunciaron en su oportunidad si el gobierno de Chiapas no frena a los caciques, entonces marcharán a la ciudad de México donde establecerán un plantón para pedir a la Secretaría de Gobernación “alto a la intolerancia religiosa”.
Chiapas es la entidad con mayores casos de expulsión y agresiones por persecución religiosa.
Tan sólo de San Juan Chamula han sido expulsado más de 35 mil evangélicos.
Las Margaritas se ha colocado como el segundo municipio con mayores casos de hostigamiento contra los protestantes.
Manuel de los Santos.
La Trinitaria, Chis; 20 de agosto.- Evangélicos de la comunidad Santa Rita
denunciaron que los caciques católicos acercaron la persecución en su contra desde hace varios días y el lunes que dio inicio el ciclo escolar, no permitieron a los niños a ingresar a los planteles educativos.Lejos de cesar el hostigamiento como presumió el subsecretario de Asuntos Religiosos, Jorge Lanz Garrido, los evangélicos tienen su versión y denunciaron que los caciques incrementaron la persecución en su contra en las últimas horas.
Por lo mismo, las ocho familias, que hace un total de 30 personas denunciaron que en Santa Rita existe un clima de inseguridad y zozobra, todo porque los caciques se sienten “intocables” por parte de la Fiscalía estatal.
La libertad religiosa en esa comunidad “es letra muerta” y por lo mismo clamaron al gobernador Juan Sabines Guerrero, que cumpla con el mandato de “Hechos no palabras”.
Durante dos años y cinco meses, los caciques católicos han sufrido fuertes presiones para que renuncien a su creencia y se sumen a festividad de Santa Rita, que se venera en la localidad ubicada a unos diez kilómetros de la cabecera de La Trinitaria.
En este lapso, los caciques despojaron a los miembros de la Iglesia Asamblea de Dios, de sus solares, prohibieron a los habitantes que compren en las tiendas y ahora se sumó el impedimento para que más de una docena de niños asistan a la escuela primaria.
Desde el inicio de la persecución religiosa, los 30 evangélicos interpusieron tres averiguaciones previas en la Fiscalía, por delitos de robo con violencia, daños intencionados y despojo, pero estas no les han dado trámite y consignado a un juez.
Demandas en la Fiscalía
Estas son la AL08/028/2005 por robo con violencia en contra de Gloria Gladis Aguilar Aguilar; la AL08/030/2005, por despojo en contra de Pablo Roselín Gómez, Federico Hernández Aguilar, Adán Aguilar Pérez, Rigoberto Aguilar Pérez y Caralampio Aguilar Aguilar; y la AI08/065/2005 por daños intencionales y asociación delictuosa en contra de José Alfredo Aguilar Pérez, Adán Aguilar Pérez, Rigoberto Aguilar Pérez, Fredy Pablo Roselín Cruz Gómez y Humberto García Aguilar.El pastor de la iglesia, Adán Aguilar Pérez acusó a los caciques católicos Valdemar Aguilar Vázquez, Ricardo Hernández López, Jesús Aguilar Torres y Ricardo Hernández Calvo, de encabezar las acciones en su contra.
Pese a que en días pasados los evangélicos aceptaron sostener una reunión con los católicos, en la cabecera municipal de La Trinitaria, donde incluso se firmó un documento de buena intensión, los primeros no lo respetaron y continuaron con la persecución.
Ahí el gobierno pidió a los evangélicos que desistieran de la acción penal, pero ellos aseguran que los delitos cometidos “no pueden ser negociables”.
Aguilar Pérez cree que los católicos se sienten protegidos por el gobierno porque dos años y medio después ninguno de los agresores ha sido detenido y consignado ante las autoridades.
Aumenta intolerancia
Debido a que los católicos se sienten “protegidos”, el hostigamiento se extendió hacia los miembros de la iglesia “Testigos de Jehová” y en días pasado uno de los miembros de esta denominación ya fue despojado de un terreno, de un solar y a otro del destruyeron galeras y cercas.
La persecución, aclaró, no es solo contra nosotros, pues el hostigamiento se extendió hacia los Testigos de Jehová, a uno lo despojaron de sus terrenos, solares y a otro le destruyeron sus galeras y cercas, la libertad religiosa es letra muerta, dijo el pastor Aguilar Pérez.
Los evangélicos anunciaron en su oportunidad si el gobierno de Chiapas no frena a los caciques, entonces marcharán a la ciudad de México donde establecerán un plantón para pedir a la Secretaría de Gobernación “alto a la intolerancia religiosa”.
Chiapas es la entidad con mayores casos de expulsión y agresiones por persecución religiosa.
Tan sólo de San Juan Chamula han sido expulsado más de 35 mil evangélicos.
Las Margaritas se ha colocado como el segundo municipio con mayores casos de hostigamiento contra los protestantes.
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