Gabriela Coutiño
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 13 marzo.- Acatando la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), autoridades penitenciarias del penal El Amate, liberaron al indígena tzotzil, Marcos Arias Pérez, quien se encontraba sentenciado por su participación en la matanza de Acteal ocurrida el 22 de diciembre de 1997, donde fueran masacrados 45 indígenas.
Con él, han sido liberados por “reconocimiento de inocencia” por el máximo tribunal de justicia 58 tzotziles desde 2010 a la fecha, luego de la reforma que se hizo al artículo primero de la constitución que “privilegia el imperio de los convenios de derechos humanos”, dijo en entrevista Noé Castañón León, secretario de gobierno de Chiapas.
En el penal El Amate, ubicado en el municipio de Cintalapa, aún quedan en prisión 22 indígenas, todos originarios del municipio de Chenalhó, quienes cumplen sentencias por homicidio y lesiones calificadas y portación de armas de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
En Chenalhó no los quieren
El liberado Marcos Arias Pérez, al igual que los demás que han sido puesto en libertad en los últimos años no podrá regresar a su comunidad de origen, para evitar confrontaciones, dijo Castañón León.
“Nosotros hemos estado luchando para que no se tenga una confrontación, porque en Acteal no los quieren, no quieren que regresen, hay molestia de las víctimas, entonces su retorno puede ocasionar un problema de confrontación o nuevos enfrentamientos, por eso les ofertamos que reflexionen y los invitamos a su reubicación en otro lugar”, señaló el Secretario de Gobierno.
El gobierno de Chiapas acordó con los indígenas excarcelados por el caso Acteal, su no regreso a las comunidades del municipio de Chenalhó para privilegiar la distensión social y la convivencia armónica en la zona.
La medida preventiva explicó Castañón León, ha permitido la reubicación en otras localidades de dos grupos de liberados
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