viernes, noviembre 30, 2012

Abren zona arqueológica




Fredy Martín Pérez

La Trinitaria, Chiapas; 29 de Noviembre.- Después de 14 años de trabajos de exploración y consolidación, este jueves se abrió al público la zona arqueológica El Lagartero, en los límites de la frontera de Guatemala, que data del año 300 a mil 400 después de Cristo.


La 15ª zona arqueológica que se abre en México en los últimos seis años, tuvo una inversión de 7.5 millones de pesos, informó el Secretario de Educación, José Ángel Córdova Villalobos, que llegó al lugar, acompañado del director general del INAH, Alfonso de María y Campos.

A unos metros de la plaza principal de la zona arqueológica, que lleva un 20 por ciento de exploración y restauración, se realizó la ceremonia de apertura del lugar.

La encargada del sitio, la arqueóloga Sonia Rivero dio a conocer que en estos 14 años, se trabajó en el juego de pelota, con sus altares, (en las estructuras que están en el sureste y al este) y las cuatro pirámides que delimitan la plaza principal.

También se exploraron los siete basamentos habitacionales, ubicados en la plaza principal del sitio, que consisten en edificios con “cimentación de dos hiladas de piedra”, pero sin las paredes que probablemente fueron de material perecedero, donde “también se ha excavado”.
Rivero llegó a la zona en 1997, pero antes el investigador norteamericano Tomás Lee, ya había realizado algunos estudios en el área, donde los pobladores modernos lo usaban para sembrar maíz y mantener sus animales.
Al llegar Rivero al ejido Colón, los pobladores le dijeron que en el lugar había “unos cerritos”, que eran las pirámides de lo que se conoce como El Lagartero, que habían sido cubiertas por la maleza y árboles.
En este tiempo de trabajo, Rivero halló una estela con la imagen donde un personaje somete a otro, un promedio de cien piezas de cerámica (algunas del estilo clásico temprano y hasta del posclásico).
La arqueóloga dio a conocer en entrevista con este diario, que el apogeo del sitio puede registrarse en el clásico tardío, que va del 700 al 900 después de Cristo.

-¿Cuál era la importancia de este lugar?
-Es importante, porque era el paso de las tierras altas guatemaltecas, Los Cuchumatanes y la bajada para las tierras planas, antes de llegar a Comitán y por aquí pasaba todo el material de obsidiana, que venía del Río Zaculeo, donde hay piedra ígnea.
Agregó que El Lagartero, que tiene influencia arquitectónica azteca, por el uso del talud y el tablero, conectaba con las zonas arqueológicas de Chinkultic, Tenam Puente y otras que se encuentran en la cuenca del Río Grijalva.
En la zona se halló cerámica que data del posclásico, que comprende el año mil 400 después de Cristo, policroma y con influencia guatemalteca de Chinautla.
Los mayas del lugar, “eran muy buenos ceramistas” que trajeron patrones de otros lugares, como del Petén, que se reflejaron en la elaboración de sus vasos, “al estilo de códice, que ellos tomaban y copiaban, para hacerlo a su modo, por eso tienen seudoglifos y no glifos completos”.
Entre otros descubrimientos, en el lugar, se encuentra la cabeza de un lagarto en molde, que es material del posclásico, que mandaron hacer los antiguos habitantes, porque en el área “no hay cobre, no hay metales” y pudo haber tenido su origen en Oaxaca.
También destacan la figura de un cascabel y un anillo con cabeza de pájaro, éste que fue hallado en la última temporada de trabajos, explicó Rivero.
Por su parte, el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Alfonso de María y Campos, dijo que en el sexenio que concluye fueron abiertas 15 zonas arqueológicas.

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