viernes, junio 22, 2012

Buscaban oro en excavación del INAH

Nehemías Jiménez.
Comitán, Chiapas; 21 de junio.- Varias patrullas de la Policía Municipal y Estatal se movilizaron el día de ayer, luego de que dos hombres trataron de ingresar a un terreno donde el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), mantenía una excavación, para presuntamente buscar otras reliquias arqueológicas y oro, en el barrio de Chichimá Guadalupe.

Los hechos se registraron alrededor de la 01:00 horas, cuando Jorge Escandón Arguello, con domicilio en el fraccionamiento Bosques de Comitán, en la manzana, lote 10, arribó al predio en donde personal del INAH mantiene una excavación para recuperar restos óseos de la época prehispánica.
De acuerdo con la información de la policía, Escandón Arguello llegó en un vehículo acompañado de otro individuo, quienes trataron de convence al agente de la Policía que se encontraba resguardando el lugar, para poder ingresar y realizar excavaciones.
Aparentemente los individuos ofrecieron cierta cantidad de dinero al oficial, pero debido a que este se rehusaba a ayudarlos, mencionaron que si encontraban algún objeto valioso, lo compartiría con él, ya que aseguraban que en el sitio se encontraban más ollas, como la encontrada el pasado 6 de mayo con restos humanos que datan entre los años los años 700 y 900 años D.C.
La insistencia de estos, obligó a que el elemento policiaco pidiera ayuda con los comandantes de grupo, lo que originó una intensa movilización por parte de agentes municipales y de la Policía Estatal Preventiva.
Al momento en que varias unidades de la policía arribaron, Escandón Arguello aseguró que el predio le pertenecía, ya que Alberto Rivera Caballero –actual propietario-, no había terminado de pagarle.
“Bueno lo que yo quiero es que ya no entre nadie a mis terrenos, los señores –del INAH-, ya levantaron los huesos que habían y ya no hay nada”, mencionó Escandón Arguello.
Tras varios minutos de alegatos, los agentes de la Policía exhortaron a que Escandón Arguello, acudieran ante las oficinas del INAH, para llegar a un acuerdo con ellos.
Después del incidente, el lugar quedó resguardado por varios agentes policiacos.

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