Las Margaritas, Chis; 4 de julio.- El domingo se suscribió el fin de diez años de un gobierno de izquierda que arribó en el 2000, con el triunfo de Pablo Salazar Mendiguchía, que puso fin al gobierno hegemónico del PRI en Chiapas.
“No hay nada que hacer”, apostilló un viejo dirigente del PRD, que después de la media noche supo que la tendencia no le favorecía para los candidatos a la alcaldía y diputación Roberto Alfaro y Margarita Moreno.
Con sus altibajos, quiebres y divisiones la izquierda margaritense tiene su punto de inflexión con el Frente Democrática Nacional (FDN) al impulsar en 1988, a Antonio Hernández Cruz, como candidato a la presidencia, pero fue derrotado por el PRI.
Vendría entonces otros intentos con abanderados como Rafael Guillén Domínguez, que también fue derrotado.
Pero fue sin duda el triunfo de Jorge Luis Escandón Hernández, en el 2000, el que marcó el gobierno de la alternancia, después de varias décadas de que el PRI administró el poder.
A la salida de el ex dirigente estatal del PRD, Escandón Hernández le tocaría llegar a la alcaldía José Antonio Vázquez Hernández (a) “El Camarón” y luego Rafael Guillén Domínguez, que recién había dejado la diputación local.
Sin embargo, la armonía de la izquierda margaritense se resquebrajo y el pacto que había entre el PRD y las organizaciones sociales se rompió, hace apenas el año pasado, cuando el instituto se resquebrajó por la disputa del poder y acusaciones mutuas.
De a principios de la década tuvo una fractura con la salida de Límbano Vázquez Ruiz y la renuncia de varias cabezas del PRD que fueron a parar al PRI.
Pero fue hace unos meses cuando se da la fragmentación con la que se pierde la esperanza de continuar en el poder y es cuando se da la división de la CIOAC en los bandos “Histórica”, en manos de José Antonio Vázquez Hernández y Luis Hernández Cruz y la “Democrática”, en poder de Miguel Vázquez Hernández.
Lo grave fue también el enfrentamiento generado en abril, que dejó una treintena de lesionados y el desafuero de Miguel Vázquez Hernández, como diputado local.
Ahora, con un ropaje nuevo, la fracción de la CIOAC “Democrática”, se apresta a mantenerse en la alcaldía y la diputación local por el distrito XX, pero ya no hay nada de la vieja izquierda consecuente que lloró amargas derrotas antes del 2000.
“No hay nada que hacer”, apostilló un viejo dirigente del PRD, que después de la media noche supo que la tendencia no le favorecía para los candidatos a la alcaldía y diputación Roberto Alfaro y Margarita Moreno.
Con sus altibajos, quiebres y divisiones la izquierda margaritense tiene su punto de inflexión con el Frente Democrática Nacional (FDN) al impulsar en 1988, a Antonio Hernández Cruz, como candidato a la presidencia, pero fue derrotado por el PRI.
Vendría entonces otros intentos con abanderados como Rafael Guillén Domínguez, que también fue derrotado.
Pero fue sin duda el triunfo de Jorge Luis Escandón Hernández, en el 2000, el que marcó el gobierno de la alternancia, después de varias décadas de que el PRI administró el poder.
A la salida de el ex dirigente estatal del PRD, Escandón Hernández le tocaría llegar a la alcaldía José Antonio Vázquez Hernández (a) “El Camarón” y luego Rafael Guillén Domínguez, que recién había dejado la diputación local.
Sin embargo, la armonía de la izquierda margaritense se resquebrajo y el pacto que había entre el PRD y las organizaciones sociales se rompió, hace apenas el año pasado, cuando el instituto se resquebrajó por la disputa del poder y acusaciones mutuas.
De a principios de la década tuvo una fractura con la salida de Límbano Vázquez Ruiz y la renuncia de varias cabezas del PRD que fueron a parar al PRI.
Pero fue hace unos meses cuando se da la fragmentación con la que se pierde la esperanza de continuar en el poder y es cuando se da la división de la CIOAC en los bandos “Histórica”, en manos de José Antonio Vázquez Hernández y Luis Hernández Cruz y la “Democrática”, en poder de Miguel Vázquez Hernández.
Lo grave fue también el enfrentamiento generado en abril, que dejó una treintena de lesionados y el desafuero de Miguel Vázquez Hernández, como diputado local.
Ahora, con un ropaje nuevo, la fracción de la CIOAC “Democrática”, se apresta a mantenerse en la alcaldía y la diputación local por el distrito XX, pero ya no hay nada de la vieja izquierda consecuente que lloró amargas derrotas antes del 2000.
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