-Tendremos que soportar a los diputados dos años más y a los que ellos nombren para los gobiernos municipales.
-Concepción Villafuerte-
Hace más de un mes y como lo dimos a conocer hace 15 días, el Congreso del estado presidido por Ana Elisa López Coello, originaria de esta ciudad y diputada plurinominal por el PAN, en una sucia maniobra presidió también la sesión en donde se aprobaron las reformas a la Constitución Política del Estado de Chiapas, en donde a iniciativa enviada por el gobernador Juan Sabines Guerrero, los diputados locales permanecerán en el cargo dos años más, es decir hasta el 2012.
De igual manera, los ayuntamientos terminarán su período el 31 de diciembre de 2010, pero en lugar de que hayan elecciones para un nuevo ayuntamiento que gobierno los dos años siguientes, esos mismos diputados bandidos que ahora tenemos, nombrarán a 118 «concejos municipales», contraviniendo totalmente la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que fue promulgada el 5 de febrero de 1917 y que era y debería seguir siendo la Madre de todas las Leyes.
Pero un congresito enano y un gobernadorcito ebrio, ebrio de todo, no sólo de aguardiente, también de poder, de ese poder efímero que en unos cuantos años se les acaba, se les ocurrió reformarla para apostarse en el falso trono que ahora ocupan y que creen durará toda la vida.
Cómo lo hicieron:
En forma burda, el 11 de septiembre pasado, fingieron una plenaria con otros temas, ahí aprobaron la reforma, la enviaron al ejecutivo y ni tardo ni perezoso ordenó la publicación para el 16 de septiembre, que obviamente no apareció publicada en ningún periódico y menos en el periódico oficial, para que nadie pudiera retomarlo y hacer, por lo menos, escándalo, de tal manera que, pasados 30 días que TODOS, guardaron silencio, el 16 de octubre, afanosos y oficiosos comenzaron a hacer declaraciones, a sabiendas que nadie pude impugnarla, o como le llaman jurídicamente hacer un juicio de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia, como ocurrió hace tres años cuando Mariano Díaz Ochoa se oponía a esta misma sucia maniobra siendo diputado local, pero ahora cambió de opinión y fue uno de los más aguerridos promotores de las leperadas del gobernador y el congreso.
Así pues, lectores que gustan de leer cosas desagradables, la Constitución de Chiapas, se lo llevó la fregada, el «Sufragio efectivo. No reelección», lema de nuestra Carta Magna que le costó al País más de un millón de muertos durante la Revolución de 1910 y que estamos a punto de cumplir 99 años, se limpiaron el fundillo con su texto unos infelices diputadillos que no sirven ni como papel sanitario.
Así también tendremos a otro grupo de inútiles, como los de ahora o peores quizá, «gobernando» hasta el 2012 en el palacio municipal.
Ciudadanos chiapanecos: ¿Será que todos son agachones, valemadristas, lamepatas?
¿No hay abogados, licenciados en derecho, sociólogos, antropólogos, politólogos que analicen la triste situación de Chiapas y que hagan una propuesta de gobierno?
Si no es así, ¡que el Pueblo se joda!
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