Juan de Dios García Davish
Tapachula, Chis; 27 de septiembre.- El gobierno de Chiapas puso en operación un programa integral de protección, salud, educación y regularización migratoria con el apoyo del Instituto Nacional de Migración y los consulados de los países centroamericanos, para beneficiar a más de 200 familias de indígenas guatemaltecos indocumentados que laboran en condiciones infrahumanas en el vertedero municipal de Tapachula, en donde la Comisión Nacional de los Derechos Humanos participa como observador.
Por lo menos una treintena de funcionarios y trabajadores de las diversas dependencias iniciaron, desde las nueve de la mañana, el censo para establecer el número total de las personas que trabajan en el vertedero, así como su nacionalidad, edad y los hijos que tienen.
El programa se implementó a raíz de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió la recomendación número 25 en contra de las autoridades locales, estatales y del Instituto Nacional de Migración por permitir y tolerar la violación a los derechos humanos de los indígenas en el basurero y en las calles de Tapachula.
La CNDH inició la investigación ante las dramáticas y desgarradoras fotos que publicó la Revista Milenio el dos de mayo del 2007, en donde se observa a niños de cinco y seis años conviviendo con zopilotes, perros y ratas, en medio de deshechos putrefactos, sin el mínimo de condiciones laborales e higiénicas.
La coordinadora de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración, Alma Rosa Altamirano, confirmó que por situaciones humanitarias el INM otorgará las facilidades necesarias para regularizar a las doscientas familias de indígenas guatemaltecos, hondureños y salvadoreños que laboran desde más de 15 años, en el vertedero. “Se les otorgará FM2 o TF – Trabajadores Fronterizos, de acuerdo al caso”, idicó.
El jefe del Departamento de Derechos Humanos del Ayuntamiento de Tapachula, Moisés Sánchez, explicó que la Secretaría para el Desarrollo de la Frontera Sur encabeza el programa con el apoyo de la Oficina de Atención al Migrante, Oficialía del Registro Civil y Salud para que en forma conjunta coadyuven esfuerzos que permitan a corto plazo que los indígenas vivan y trabajen en forma digna.
Sánchez López admitió que “duele e hiere” en las condiciones en que trabajaban los centroamericanos, en su mayoría de origen guatemaltecos. Por lo que presentó una denuncia formal ante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes para que se investigue y castigue a los responsables de permitir los abusos, irregularidades y extorsiones.
En el mismo documento, la CNDH pide a Cecilia Romero, Comisionada del Instituto Nacional de Migración que actúen conforme a las normas legales, a fin de evitar que migrantes guatemaltecos, principalmente niños, niñas y mujeres con hijos lactando, sean víctimas de los abusos; También pide que se inicien los procedimientos administrativos en contra del personal de ese instituto que omitió realizar las acciones de verificación al interior del basurero municipal y de las calles de Tapachula.
Con estas acciones se está atendiendo la recomendación que emitió el 10 de julio del 2007 la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, acotó Sánchez López quien a su vez, reveló que en forma paralela se trabaja en un proyecto similar denominado “Los Hijos del aguila y el quetzal” para rescatar a los niños “canguros” – vendedores de dulces- y menores de edad de México y Centroamérica que se prostituyen en Tapachula.
Estamos con trabajos de inteligencia, ya que suponemos que detrás de ellos hay intrincadas bandas de “enganchadores” que los contratan desde Guatemala para explotarlos en México.
Tapachula, Chis; 27 de septiembre.- El gobierno de Chiapas puso en operación un programa integral de protección, salud, educación y regularización migratoria con el apoyo del Instituto Nacional de Migración y los consulados de los países centroamericanos, para beneficiar a más de 200 familias de indígenas guatemaltecos indocumentados que laboran en condiciones infrahumanas en el vertedero municipal de Tapachula, en donde la Comisión Nacional de los Derechos Humanos participa como observador.
Por lo menos una treintena de funcionarios y trabajadores de las diversas dependencias iniciaron, desde las nueve de la mañana, el censo para establecer el número total de las personas que trabajan en el vertedero, así como su nacionalidad, edad y los hijos que tienen.
El programa se implementó a raíz de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió la recomendación número 25 en contra de las autoridades locales, estatales y del Instituto Nacional de Migración por permitir y tolerar la violación a los derechos humanos de los indígenas en el basurero y en las calles de Tapachula.
La CNDH inició la investigación ante las dramáticas y desgarradoras fotos que publicó la Revista Milenio el dos de mayo del 2007, en donde se observa a niños de cinco y seis años conviviendo con zopilotes, perros y ratas, en medio de deshechos putrefactos, sin el mínimo de condiciones laborales e higiénicas.
La coordinadora de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración, Alma Rosa Altamirano, confirmó que por situaciones humanitarias el INM otorgará las facilidades necesarias para regularizar a las doscientas familias de indígenas guatemaltecos, hondureños y salvadoreños que laboran desde más de 15 años, en el vertedero. “Se les otorgará FM2 o TF – Trabajadores Fronterizos, de acuerdo al caso”, idicó.
El jefe del Departamento de Derechos Humanos del Ayuntamiento de Tapachula, Moisés Sánchez, explicó que la Secretaría para el Desarrollo de la Frontera Sur encabeza el programa con el apoyo de la Oficina de Atención al Migrante, Oficialía del Registro Civil y Salud para que en forma conjunta coadyuven esfuerzos que permitan a corto plazo que los indígenas vivan y trabajen en forma digna.
Sánchez López admitió que “duele e hiere” en las condiciones en que trabajaban los centroamericanos, en su mayoría de origen guatemaltecos. Por lo que presentó una denuncia formal ante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes para que se investigue y castigue a los responsables de permitir los abusos, irregularidades y extorsiones.
En el mismo documento, la CNDH pide a Cecilia Romero, Comisionada del Instituto Nacional de Migración que actúen conforme a las normas legales, a fin de evitar que migrantes guatemaltecos, principalmente niños, niñas y mujeres con hijos lactando, sean víctimas de los abusos; También pide que se inicien los procedimientos administrativos en contra del personal de ese instituto que omitió realizar las acciones de verificación al interior del basurero municipal y de las calles de Tapachula.
Con estas acciones se está atendiendo la recomendación que emitió el 10 de julio del 2007 la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, acotó Sánchez López quien a su vez, reveló que en forma paralela se trabaja en un proyecto similar denominado “Los Hijos del aguila y el quetzal” para rescatar a los niños “canguros” – vendedores de dulces- y menores de edad de México y Centroamérica que se prostituyen en Tapachula.
Estamos con trabajos de inteligencia, ya que suponemos que detrás de ellos hay intrincadas bandas de “enganchadores” que los contratan desde Guatemala para explotarlos en México.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario