Dalia Villatoro.
La Independencia, Chis; 28 de octubre.- Una mujer campesina enferma de tuberculosis, permanece encerrada en la cárcel de la comunidad San Isidro Zapotal, sólo por tratar de defender a otras féminas.
Martha López Escandón de 45 años de edad, quiso evitar que otras vecinas del lugar fueran multadas por las autoridades ejidales, al haber acudido a usar una caseta telefónica que funciona clandestinamente, porque la población tiene prohibido asistir.
Habitantes inconformes con esta añeja situación denunciaron que López, fue privada de su libertad desde la tarde del pasado sábado y hasta el momento ninguna autoridad gubernamental había intervenido para su liberación.
Acusaron que Everardo Morales Jiménez y Samuel Jiménez Gómez, comisariado y agente municipal de San Isidro Zapotal respectivamente, en febrero del año pasado pretendieron que la caseta telefónica particular pasara a ser parte de la comunidad.
Las autoridades ejidales establecieron que el poblador que fuera sorprendido usando la caseta telefónica propiedad de Cesar Jiménez sería mu
ltado con la cantidad de 500 pesos.
Como la caseta pertenece a Teléfonos de México (Telmex), y no pasó a ser parte de la comunidad, las autoridades ejidales determinaron que el negocio debería ser cerrado.
La caseta ha seguido prestando sus servicios de manera clandestina sobre todo a mujeres cuyos esposos trabajan fuera de México.
El pasado sábado tres mujeres que acudieron al negocio a realizar algunas llamadas telefónicas fueron sorprendidas por las autoridades ejidales y multadas con 500 pesos cada una.
Dentro del grupo se encontraba Cornelia Aguilar Jiménez, cuñada de Martha López, por lo que la ahora encarcelada pidió que les perdonaran la multa, considerándolo una injusticia, pero fue detenida y multada con 5 mil pesos y 30 días de trabajos forzados para obtener su libertad.
“A Martha le dijeron que para que aprendiera a no estarse metiendo en lo que no le importa iba a ser encerrada, no les importó su enfermedad, la tienen en la cárcel custodiada por cuatro policías como si fuera una delincuente”, confiaron.
Los inconformes que piden la intervención directa del gobernador de Chiapas Juan Sabines, añadieron que Martha viene de una familia de escasos recursos económicos e inclusive ella era el único sustento de esta, dedicándose a lavar ropa.
La Independencia, Chis; 28 de octubre.- Una mujer campesina enferma de tuberculosis, permanece encerrada en la cárcel de la comunidad San Isidro Zapotal, sólo por tratar de defender a otras féminas.
Martha López Escandón de 45 años de edad, quiso evitar que otras vecinas del lugar fueran multadas por las autoridades ejidales, al haber acudido a usar una caseta telefónica que funciona clandestinamente, porque la población tiene prohibido asistir.
Habitantes inconformes con esta añeja situación denunciaron que López, fue privada de su libertad desde la tarde del pasado sábado y hasta el momento ninguna autoridad gubernamental había intervenido para su liberación.
Acusaron que Everardo Morales Jiménez y Samuel Jiménez Gómez, comisariado y agente municipal de San Isidro Zapotal respectivamente, en febrero del año pasado pretendieron que la caseta telefónica particular pasara a ser parte de la comunidad.
Las autoridades ejidales establecieron que el poblador que fuera sorprendido usando la caseta telefónica propiedad de Cesar Jiménez sería mu
ltado con la cantidad de 500 pesos.Como la caseta pertenece a Teléfonos de México (Telmex), y no pasó a ser parte de la comunidad, las autoridades ejidales determinaron que el negocio debería ser cerrado.
La caseta ha seguido prestando sus servicios de manera clandestina sobre todo a mujeres cuyos esposos trabajan fuera de México.
El pasado sábado tres mujeres que acudieron al negocio a realizar algunas llamadas telefónicas fueron sorprendidas por las autoridades ejidales y multadas con 500 pesos cada una.
Dentro del grupo se encontraba Cornelia Aguilar Jiménez, cuñada de Martha López, por lo que la ahora encarcelada pidió que les perdonaran la multa, considerándolo una injusticia, pero fue detenida y multada con 5 mil pesos y 30 días de trabajos forzados para obtener su libertad.
“A Martha le dijeron que para que aprendiera a no estarse metiendo en lo que no le importa iba a ser encerrada, no les importó su enfermedad, la tienen en la cárcel custodiada por cuatro policías como si fuera una delincuente”, confiaron.
Los inconformes que piden la intervención directa del gobernador de Chiapas Juan Sabines, añadieron que Martha viene de una familia de escasos recursos económicos e inclusive ella era el único sustento de esta, dedicándose a lavar ropa.
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