jueves, agosto 09, 2007

Frayba presentó ante la CIDH informe sobre tortura en Chiapas

Angeles Mariscal
Tuxtla Gutiérrez, Chis.,8 de agosto. El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas presentó ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) un informe sobre la práctica de la tortura y detenciones arbitrarias en la entidad, donde señalan que esas dos actividades, y las del arraigo, se aplican sistemáticamente.
El informé que se presentó durante una reunión con Florentín Meléndez, actual presidente de la CIDH y el relator para México y sobre Personas Privadas de la Libertad, Itzel Silva, abogada del centro humanitario, señaló que estas actividades son “focos alarmantes de la violación a derechos fundamentales en el estado”.
“En cada centro de detención son constantes el sometimiento y humillación a la dignidad humana, además de la extorsión. En la mayoría de casos, y de manera paradójica, son los directores a cargo quienes violentan los derechos humanos de las personas bajo su custodia”, sostiene el informe.
Un ejemplo de lo anterior fue lo ocurrido el 25 de julio pasado en el municpio indígena de Amatenango del Valle. Ese día, por “equivocación”, fue detenido el tseltal Leonardo Hernández Escandón, por agentes adscritos a la Fiscalía del Ministerio Publico del municipio de Teopisca, sin que presentaran orden de aprensión o justificación alguna.
Durante el traslado a las Fiscalía General de Justicia del Estado lo torturaron. En los llamados separos, lo presentaron con otros dos sujetos que estaban detenidos, quienes dijeron no conocerlo.
Por lo que ante el presunto “error” cometido al detenerlo, “me dijeron que no dijera nada de lo que había pasado ya que me habían tratado muy bien. Que se habían confundido de persona. Me sacaron fotografías y me dijeron que disculpara porque no era el que andaban buscando”. Lo liberaron luego de entregarle 150 pesos para su regreso a Amatenango.
En la reunión con los representantes de la CIDH, el centro humanitario detalló que otra práctica común es el uso de la figura procedimental del “Arraigo”, que a su ver viola derechos básicos al debido proceso y la presunción de inocencia, garantizados por la Convención Americana de Derechos Humanos, además de ser inconstitucional.
“En el Arraigo la víctima no se encuentra formalmente detenida ya que no ha sido acusada de delito alguno, ni está bajo proceso judicial, pero en realidad se encuentra privada de su libertad en lugares no oficiales bajo custodia de agentes de la misma Fiscalía, incluso hasta por un periodo de 90 días bajo un status jurídico ambiguo”.
Es utilizado frecuentemente por los Fiscales del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado quienes solicitan esta medida a un Juez Penal, y tiene como fin generar un desgaste psicológico y de presión hacia la víctima así como para la fabricación de delitos, acusaron.
Añade el informe que es también una práctica recurrente que la víctima se mantenga bajo custodia de los mismos agentes policíacos que efectuaron la tortura, lo cual posibilita que se continúen actos de presión, intimidación y hostigamiento.
El presidente de la CIDH sostuvo que estudiará las denuncias a fin de definir las acciones pertinentes a realizar

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