martes, mayo 17, 2011

B’EJALTIK (Muchos Caminos)

F. Darinel
“(Yavé) Está alerta
a lo largo del buen camino
para proteger
el caminar de sus fieles.”
Proverbios (2 , 8)

“POBRE HEBERTO CASTILLO”

LOS CAMINOS DE HOY

Siempre de izquierda

En tanto Andrés Manuel López Obrador, a lo largo de seis años, ha demostrado plenamente que él nada tuvo que ver con el fraude electoral del 2006, si no al contrario, él ha estado denunciándolo constantemente en este sexenio; que inicia a agonizar, además que con esa demostración prácticamente le dice a la ciudadanía que “quiere la revancha a la buena”, y que para ello tuvo que bregar en contra corriente dentro de su partido, del cual muy estoicamente siempre dijo que no había renunciado al PRD, si no que al contrario era más perredista que antes; aun más izquierdista. Por esta razón se alió y levantó a el moribundo cuerpo político del PT, revitalizó su sangre y de nueva cuenta lo propuso como un verdadero partido político en el haber nacional.




Nada es imposible

A parte de todo esto, López Obrador tuvo que librar una batalla intrínseca en su partido, el partido que era la izquierda más sólida, y que debido a el PRI de los 90’s ha estado dividido desde siempre en grupos y en tribus, jamás dejo de ser de izquierda, y siempre de izquierda. Pero lo inimaginable ocurrió dentro de s partido, porque como afirmaba Don Álvaro Obregón, y rememorando su famosa frase, así como también aplicándola a Jesús Ortega, el dirigente perredista que el PAN en contubernio con Luis Carlos Ugalde, quien mantenía en su poder al IFE, realmente parece ser que: “nadie aguanta un cañonazo de 50 mil pesos”, pues impusieron a Jesús Ortega como nuevo dirigente del PRD, quien se suponía era un líder del viejo cuño izquierdista, el cual pasó a ser un dirigente espurio, quien durante los años que estuvo al frente de este partido político, se dedicó a allanarle y a facilitarle el camino al PAN, llevando a cabo actos y alianzas que en otro momento se consideraron impensables.



A pesar de la división

Esta decadencia política que culminó en una lucha interna, hizo que Andrés Manuel López Obrador, por propia cuenta y en una actitud sobradamente digna, se auto exiliara del PRD y se dedicara a un trabajo político netamente izquierdista, por otro lado y para abordar la opinión de hoy, antes bien vale la pena comentar que el fenómeno de la separación de corrientes, tribus y neo expresiones perredistas, es un fenómeno que siempre se dio después de unos años que el PRD naciera, vaya fue la estrategia del PRI para mantenerlo a raya, allá en la década de los 90’s, una situación que muy pocos perredistas notaron y ante la cual sucumbieron, pues muy pocos en realidad se dieron cuenta de esta sucia estratagema política, y jamás optaron por el camino o por la vía de la división. Sin embargo, este mismo fenómeno se reflejó en todos los niveles del perredismo nacional. En todas partes la división y la fractura siempre campearon, aunque eso sí nunca dejaron de ser políticos netamente de izquierda.



Lealtad cara

Toda esta explicación anterior es válida y cierta, como a la vez necesaria para equiparar también el fenómeno de la corrupción y declive de Jesús Ortega, tanto como se corrompieron otros grupos de cualquier nivel, en toda la república. Es decir que el ser “chuchos”, prácticamente es símbolo de traidores, de “manos flojas”, y para muestra, para lo cual no es necesario ir a buscar este tipo de perredistas a Michoacán o al Distrito Federal, tan solo aquí en Comitán existen los claros ejemplos de los Chuchos; y estos son “chuchos con rabia” porque “las mordidas” y las dentelladas que lanzan por los favores, votos y activismo político, ellos ya los han tazado alto y están arriba de los 50 ó 100 mil pesos; no menos.



Son de “izquierda”

Así, podemos enumerar a los “Chuchos” comitecos del perredismo como: Miguel Sántiz, el ex regidor José Manuel, Roque Luis Gordillo, “la maistra” Aidé, “el Tavo de Los Riegos”, así como todos los seguidores de estos falsos líderes de capucha negra; por citar un ejemplo “el Bulmaro del panteón”, Sergio Páez y otros más, quienes hasta han tenido la puntada y desvergüenza de todavía seguirse llamando “el grupo de los Hebertos”; me imagino que para rememorar el nombre de uno de los luchadores de izquierda más carismáticos y destacados de México, como lo fue Heberto Castillo; el hombre, el científico y el político de izquierda.



De mucha vergüenza

Que ataque de vergüenza y de ira; y hasta diarrea, le daría a “El Sr. López”, como nombró Luis Mandoki a López Obrador en el famoso documental que le realizara. Pero aparte de todo eso, qué revolcadas de vergüenza y de impotencia se dará en su tumba don Heberto Castillo, al saber que “sus Hebertos” de Comitán, como viles rameras políticas hace bien poco se reunieron para ir a jurarle fidelidad absoluta y amor eterno al Partido Verde Ecologista de México, fidelidad hacia quienes lo dirigen y lo hacen funcionar en Comitán, así como para quienes lo dirigen y aspiran a puestos políticos por parte del Verde Ecologista, pero a nivel estatal. Yo creo que a Don Heberto Castillo le daría nuevamente ganas de morirse con estas actitudes, tan deshonradas e indecorosas y a Andrés Manuel, al saber esto, éste como no se ha muerto; a éste si le darían ganas de morirse.



Ya son del PRI

Aquí sí que ni duda cabe, que lo que menos existe dentro de lo que podría llamarse “conciencia política” de estos personajes, es el acuñamiento y el desenvolvimiento, así como la práctica del concepto: “política de izquierda”, porque lo que yo creo que la única izquierda que conocen es la de las carreteras, que solo sirven para rebasar, y he ahí el meollo del asunto, ya que estas hordas lo único que quieren para sí mismos, es rebasar el nivel económico que tienen, rebasar su vergüenza y su dignidad, para estar dispuestos a entregarse con quien sea, pues ahora estos “geniales izquierdosos”, sin darse cuenta ya se han entregado al PRI les guste o no, partido que tanto decían aborrecer, dado a que ni duda cabe que el Partido Verde tan solo es un apéndice del PRI, de ahí que la alianza entre ambos prácticamente ya sea permanente.



¡Qué izquierdosos!

“Los Hebertos ya son del PRI”, quién lo dijera, pero todo es posible en este mundo de travestis, transexuales y “transpolíticos”, que por poco o nada, y obedeciendo un silbato de alta frecuencia, corren a postrarse ante el nuevo amo que les indican. Por eso la pregunta válida es la que muchos se han hecho desde siempre: ¿realmente existen ideales y dignidad política en alguien?



Es cuanto



adriancitio@yahoo.com.mx

No hay comentarios.: