Desabonados
Según versiones de algunos policías municipales de Comitán, que incluso se dijo viajaron a Tuxtla para investigar, afirman que esta policía por estar en el programa del Subsemun, recibió en diciembre del 2010 recurso económico para que fuese distribuido dentro de los elementos policiacos como bono adicional, el cual asegura se volvió “ojo de hormiga”, por lo que nunca vieron nada de ese incentivo económico.
Largo ayuno
Por si esto fuera poco, los mismos policías, desde luego policías anónimos, dijeron que las dos quincenas de diciembre del 2010 les fueron liquidadas el día 15 de diciembre junto con su aguinaldo. Y ahora se enteran que no les pagaran en esta primera quincena de enero, si no que será hasta el día 31 de este mes cuando reciban el pago de las dos quincenas trabajadas.
Cuesta de enero
Debido a que recibieron “de un jalón” todo el dinero de diciembre, el cual muy seguramente lo destinaron para regalos, fiestas, borracheras y disfrute en general, los policías en su gran mayoría, andan más pelados que un cacahuate de bolsita, y pa´ cavarla de amolar no tendrán dinero si no hasta finales de mes, en donde con toda seguridad así como llega se ira, pues a ellos si les llegó muy dura la cuesta de enero, pues tendrán que pagar una gran cantidad de deudas.
Enfermo de poder
Un conocido refrán político dice: “el poder a algunos los atonta y a otros los enloquece, pero lo más jodido de todo es que algunos con tan solo treparse a un ladrillo se marean y hasta les da ganas de vomitar”. Ese es el triste caso de
Rubén Matus, quien en las recientes horas fue designado Subsecretario de la Región Sierra-Mariscal.
Enloqueció
Es de entenderse que esta demencia “matusiana”, haya llegado a estos extremos, pues esta región, que en realidad no ha generado problemas de relevancia o de capital importancia, siempre mantuvo la jerarquía de delegado, más nunca había echado mano total de sus subsecretarios serranos, que si bien existieron no tuvieron mayores problemas en su desempeño.
Acaso porque Rubén Matus fue nombrado Subsecretario directamente en Tuxtla y de una nueva regionalización, la cual abarca mayor cantidad de municipios; quizá por esto Rubén se convirtió en un verdadero orate.
También soberbio
Sus dislates se conocieron cuando llegó a tomar posesión en la sede regional, que se encuentran en el municipio de Motozintla, lugar en donde petulantemente dijo de entrada que él era designado directamente por el gobernador, por lo que dirigiéndose a mandos policíacos, operadores políticos y demás funcionarios comisionados en esta región, con su enloquecida e iracunda mirada los barrió a todos, no sin antes amenazarlos diciéndoles que aquel que no le obedeciera inmediatamente lo despediría o en su defecto rápidamente iría a quejarse con el gobernador, para que despidan a quien se le insubordine.
Riesgoso
Este psiquiátricamente enfermo funcionario, debería de tener mucho cuidado con todas estas demenciales afirmaciones y esquizofrénicas amenazas, porque bien se nota que carece de experiencia en los asuntos de conciliación social, conciliación que inicia con una buena y excelente relación laboral, pues en estos puestos en muchas ocasiones los fracasos nacen de dentro y no con los actores sociales que constantemente protestan, se manifiestan a los funcionarios. No vaya a ser que uno de estos días Rubén Matus por estos excesos terminen siendo “amarrado” y vapuleado, no solo desde de la oscuridad por sus subalternos si no también desde la evidencia clara de hechos violentos, que él mismo desde este inicio esta desencadenando.
Según versiones de algunos policías municipales de Comitán, que incluso se dijo viajaron a Tuxtla para investigar, afirman que esta policía por estar en el programa del Subsemun, recibió en diciembre del 2010 recurso económico para que fuese distribuido dentro de los elementos policiacos como bono adicional, el cual asegura se volvió “ojo de hormiga”, por lo que nunca vieron nada de ese incentivo económico.
Largo ayuno
Por si esto fuera poco, los mismos policías, desde luego policías anónimos, dijeron que las dos quincenas de diciembre del 2010 les fueron liquidadas el día 15 de diciembre junto con su aguinaldo. Y ahora se enteran que no les pagaran en esta primera quincena de enero, si no que será hasta el día 31 de este mes cuando reciban el pago de las dos quincenas trabajadas.
Cuesta de enero
Debido a que recibieron “de un jalón” todo el dinero de diciembre, el cual muy seguramente lo destinaron para regalos, fiestas, borracheras y disfrute en general, los policías en su gran mayoría, andan más pelados que un cacahuate de bolsita, y pa´ cavarla de amolar no tendrán dinero si no hasta finales de mes, en donde con toda seguridad así como llega se ira, pues a ellos si les llegó muy dura la cuesta de enero, pues tendrán que pagar una gran cantidad de deudas.
Enfermo de poder
Un conocido refrán político dice: “el poder a algunos los atonta y a otros los enloquece, pero lo más jodido de todo es que algunos con tan solo treparse a un ladrillo se marean y hasta les da ganas de vomitar”. Ese es el triste caso de
Rubén Matus, quien en las recientes horas fue designado Subsecretario de la Región Sierra-Mariscal.
Enloqueció
Es de entenderse que esta demencia “matusiana”, haya llegado a estos extremos, pues esta región, que en realidad no ha generado problemas de relevancia o de capital importancia, siempre mantuvo la jerarquía de delegado, más nunca había echado mano total de sus subsecretarios serranos, que si bien existieron no tuvieron mayores problemas en su desempeño.
Acaso porque Rubén Matus fue nombrado Subsecretario directamente en Tuxtla y de una nueva regionalización, la cual abarca mayor cantidad de municipios; quizá por esto Rubén se convirtió en un verdadero orate.
También soberbio
Sus dislates se conocieron cuando llegó a tomar posesión en la sede regional, que se encuentran en el municipio de Motozintla, lugar en donde petulantemente dijo de entrada que él era designado directamente por el gobernador, por lo que dirigiéndose a mandos policíacos, operadores políticos y demás funcionarios comisionados en esta región, con su enloquecida e iracunda mirada los barrió a todos, no sin antes amenazarlos diciéndoles que aquel que no le obedeciera inmediatamente lo despediría o en su defecto rápidamente iría a quejarse con el gobernador, para que despidan a quien se le insubordine.
Riesgoso
Este psiquiátricamente enfermo funcionario, debería de tener mucho cuidado con todas estas demenciales afirmaciones y esquizofrénicas amenazas, porque bien se nota que carece de experiencia en los asuntos de conciliación social, conciliación que inicia con una buena y excelente relación laboral, pues en estos puestos en muchas ocasiones los fracasos nacen de dentro y no con los actores sociales que constantemente protestan, se manifiestan a los funcionarios. No vaya a ser que uno de estos días Rubén Matus por estos excesos terminen siendo “amarrado” y vapuleado, no solo desde de la oscuridad por sus subalternos si no también desde la evidencia clara de hechos violentos, que él mismo desde este inicio esta desencadenando.
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