F. Darinel
Es el tiempo del frío:
ama, apresúrate.
El viento de las horas
barre las calles, los caminos.
Jaime Sabines
“ALEGRÍA DE MUERTOS”
LOS CAMINOS DE HOY
Buen colofón
Bien dicen que “lo mal empieza, mal acaba”, y en contrario “lo que bien empieza, bien acaba”. Así, como este segundo adagio popular es como tiene y debe de terminar el trienio de Eduardo Ramírez, que inició con todas las ganas y que está terminando de igual forma; entusiasta y con ganas de verlo todo alegre, dado el vigor y el entusiasmo de su juventud y de sus; todavía, muy jóvenes años.
Más allá de que la Dirección de Desarrollo Humano y Cultura; Director y sus allegados, brillaron tanto como el plomo durante los tres años y más allá que esta dirección fue la encargada de organizar el concurso de altares y el arreglo del panteón -eso creo- es indudable que fue a instancias y a instrucciones del edil comiteco, que esta fiesta tan nuestra, de tan nuestras raíces y de nuestra añeja cultura ahora se vio diferente y con más deseos de trascendencia.
Lució
Qué bello se veía el pórtico tan multicolor, ataviado en lo alto con frutas, y lo tremenda mente linda que se veía la calzada principal del panteón municipal por la noche, iluminada, hermosa y alegre, contrariando al concepto que tenemos de que es un lugar en donde por costumbre tenemos previsto que el llanto y la tristeza viven eternamente, porque en el entendido que la muerte no es el fin de la vida, sino una etapa más del total de la vida, pero por lo que esta etapa resulta desconocida y sin presencia física, nos duele y nos acongoja. Sin embargo; insisto, si es una etapa más del total de la hermosa vida ¡qué bueno que iluminaron su calzada! ¡qué bueno que lo hicieron ver alegre! para ir alegres a visitar los restos de los que amamos y que nos esperan en esa siguiente etapa… porque ahí están, ahí nos esperan, ahí nos aguardan en una dimensión en donde el tiempo es finito y el espacio un concepto inacabado.
Creció
Qué bueno que hicieron más linda y más agradable esta fiesta; más de lo que ya es, qué bueno que la juventud y la energía de nuestro presidente municipal; que va pa’ largo en esa su joven carrera política, le dio el toque que le faltaba y qué bueno que termina como empezó: bien. Por eso esta vez no faltaron y se instituyeron; por vez primera el concurso de altares, pero como comento Raúl Espinosa Mijangos y como fueron días de asueto: “aunque se invitó a todas las escuelas e instituciones a participar, como eran días libres no lo hicieron”, así que por eso estaría bien que el siguiente director de este espacio vaya tomando nota en su agenda de trabajo anual, para que la próxima vez el concurso lo hagan unos días antes de “el puentazo” y la participación sea grande, más fastuosa y todavía más colorida.
Los altares
En los altares ya ni duda cabía de saber quién ganaría, aunque eso sí los otros no desmerecieron en belleza e ingenio, donde casi todos fueron dedicados a nuestra Rosario y a nuestro Belisario, pero no por esto dejó de ser tan lindamente policromo el tapiz de “La Catrina” de la UNACH y su altar dedicado a “La Doña”, así como las muertes “marimberos” y “los danzantes” esqueleto, “la novia” y “el médico” que el CENTRA, La Biblioteca pública, El DIF, El Centro Cultural Rosario Castellanos y la UNACH nos regalaron, los que fueron y se entregaron como la mejor ofrenda a nuestro recuerdo y a nuestras tradiciones. Así “El altar a Rosario” y “las calacas marimberos” y “los danzantes” de La Biblioteca Pública se impusieron con la friolera de 1864 votos del público visitante para obtener el primer lugar –yo vote por este- su más cercano perseguidor obtuvo; y en segundo lugar, 241 votos y el tercer lugar con 228 votos, pero más allá está el entusiasmo infundido y la nueva cara ofrecida en esta fiesta de muertos, que de aquí en adelante ya no puede disminuir, sino crecer en todos los aspectos.
“El pero”
Si bien es cierto que por un lado creció la festividad, también es cierto que creció la ineptitud de la Coordinación de Mercados y Ambulantaje, que este año volvieron a permitir que los vendedores y puestos invadieran la banqueta del lado poniente del panteón más ambulantes que vendían de todo y que entorpecían el tránsito fluido de los visitantes del panteón en la calzada principal interna; con decirles que hasta “una tía”, ahí sobre las gradas de uno de esos mausoleos “hay ‘taba” vendiendo cebollas ¿cómo la ven?. De por sí la calzada del panteón; la externa, se pone peligrosa en esos días y más de la glorieta a “la curva”, porque los automóviles circulan en doble sentido ahí, todavía le quitaron espacios de camino seguro a los peatones en la banqueta poniente, en donde hasta “El Rosy” y sus garnachas le permitieron que ya de una vez invadiera todo el ancho de la banqueta, y ahí deberá de tomar nota el siguiente o siguientes coordinadores de mercados, que no deben de ceder ante presiones de nadie, ni deben de mostrarse blanditos y tibios. Y en el caso de que vuelvan brindar esos espacios porque ya “de altiro” es mucha la incompetencia y el miedo, pues que ese tramo de la Calzada del Panteón lo dejen de un solo sentido, desde la esquina de donde se encuentra una refaccionaria de nombre “Rugoja”, hasta la glorieta que tiene “el monumento verde”; ese que tiene su cruz calada hasta arriba. Y luego que no está bien que yo señale a vialidad, que si “la defienden”, “que la dignifican”, “que trabajó muy bien” y no sé que tantas “cosas buenas”…sí pué.
Siempre el abuso
Porque si de valor se trata para no dejar invadir a los comerciantes, la muestra la dieron algunos locatarios de La Central de Abasto, que cuando se dieron cuenta que la gente de “El Tavo de Los Riegos” había “dado permiso” para invadir la calle interna de este mercado, la parte que desemboca sobre la 11ª calle sur poniente, para que sus agremiados y agremiadas vendieran, que los demás locatarios los van a quitar; y no a besos precisamente, pues el vacío de autoridad en este rubro es muy palpable. Por esa razón ya que ahí no pudieron, en otro lugar parte los agremiados y agremiadas de “El Tavo” invadieron el tramo de la 10ª calle sur poniente, entre bulevar y 4ª avenida poniente sur, y no es que sean otros comerciantes sin local, eran los mismos comerciantes que les dieron esos mercaditos, los que “El Tavo” puso a bloquear calles para que les dieran ese mercadito. Así, para “vender más”, sin más, ni más invadieron la calle y como el “Macondo” de los “100 años de Soledad” de Gabriel García Márquez… “no pasa nada”.
En fin que con más cosas buenas que malas, esta hermosa festividad llegó a su fin.
Es cuanto.
adriancitio@yahoo.com.mx
Es el tiempo del frío:
ama, apresúrate.
El viento de las horas
barre las calles, los caminos.
Jaime Sabines
“ALEGRÍA DE MUERTOS”
LOS CAMINOS DE HOY
Buen colofón
Bien dicen que “lo mal empieza, mal acaba”, y en contrario “lo que bien empieza, bien acaba”. Así, como este segundo adagio popular es como tiene y debe de terminar el trienio de Eduardo Ramírez, que inició con todas las ganas y que está terminando de igual forma; entusiasta y con ganas de verlo todo alegre, dado el vigor y el entusiasmo de su juventud y de sus; todavía, muy jóvenes años.
Más allá de que la Dirección de Desarrollo Humano y Cultura; Director y sus allegados, brillaron tanto como el plomo durante los tres años y más allá que esta dirección fue la encargada de organizar el concurso de altares y el arreglo del panteón -eso creo- es indudable que fue a instancias y a instrucciones del edil comiteco, que esta fiesta tan nuestra, de tan nuestras raíces y de nuestra añeja cultura ahora se vio diferente y con más deseos de trascendencia.
Lució
Qué bello se veía el pórtico tan multicolor, ataviado en lo alto con frutas, y lo tremenda mente linda que se veía la calzada principal del panteón municipal por la noche, iluminada, hermosa y alegre, contrariando al concepto que tenemos de que es un lugar en donde por costumbre tenemos previsto que el llanto y la tristeza viven eternamente, porque en el entendido que la muerte no es el fin de la vida, sino una etapa más del total de la vida, pero por lo que esta etapa resulta desconocida y sin presencia física, nos duele y nos acongoja. Sin embargo; insisto, si es una etapa más del total de la hermosa vida ¡qué bueno que iluminaron su calzada! ¡qué bueno que lo hicieron ver alegre! para ir alegres a visitar los restos de los que amamos y que nos esperan en esa siguiente etapa… porque ahí están, ahí nos esperan, ahí nos aguardan en una dimensión en donde el tiempo es finito y el espacio un concepto inacabado.
Creció
Qué bueno que hicieron más linda y más agradable esta fiesta; más de lo que ya es, qué bueno que la juventud y la energía de nuestro presidente municipal; que va pa’ largo en esa su joven carrera política, le dio el toque que le faltaba y qué bueno que termina como empezó: bien. Por eso esta vez no faltaron y se instituyeron; por vez primera el concurso de altares, pero como comento Raúl Espinosa Mijangos y como fueron días de asueto: “aunque se invitó a todas las escuelas e instituciones a participar, como eran días libres no lo hicieron”, así que por eso estaría bien que el siguiente director de este espacio vaya tomando nota en su agenda de trabajo anual, para que la próxima vez el concurso lo hagan unos días antes de “el puentazo” y la participación sea grande, más fastuosa y todavía más colorida.
Los altares
En los altares ya ni duda cabía de saber quién ganaría, aunque eso sí los otros no desmerecieron en belleza e ingenio, donde casi todos fueron dedicados a nuestra Rosario y a nuestro Belisario, pero no por esto dejó de ser tan lindamente policromo el tapiz de “La Catrina” de la UNACH y su altar dedicado a “La Doña”, así como las muertes “marimberos” y “los danzantes” esqueleto, “la novia” y “el médico” que el CENTRA, La Biblioteca pública, El DIF, El Centro Cultural Rosario Castellanos y la UNACH nos regalaron, los que fueron y se entregaron como la mejor ofrenda a nuestro recuerdo y a nuestras tradiciones. Así “El altar a Rosario” y “las calacas marimberos” y “los danzantes” de La Biblioteca Pública se impusieron con la friolera de 1864 votos del público visitante para obtener el primer lugar –yo vote por este- su más cercano perseguidor obtuvo; y en segundo lugar, 241 votos y el tercer lugar con 228 votos, pero más allá está el entusiasmo infundido y la nueva cara ofrecida en esta fiesta de muertos, que de aquí en adelante ya no puede disminuir, sino crecer en todos los aspectos.
“El pero”
Si bien es cierto que por un lado creció la festividad, también es cierto que creció la ineptitud de la Coordinación de Mercados y Ambulantaje, que este año volvieron a permitir que los vendedores y puestos invadieran la banqueta del lado poniente del panteón más ambulantes que vendían de todo y que entorpecían el tránsito fluido de los visitantes del panteón en la calzada principal interna; con decirles que hasta “una tía”, ahí sobre las gradas de uno de esos mausoleos “hay ‘taba” vendiendo cebollas ¿cómo la ven?. De por sí la calzada del panteón; la externa, se pone peligrosa en esos días y más de la glorieta a “la curva”, porque los automóviles circulan en doble sentido ahí, todavía le quitaron espacios de camino seguro a los peatones en la banqueta poniente, en donde hasta “El Rosy” y sus garnachas le permitieron que ya de una vez invadiera todo el ancho de la banqueta, y ahí deberá de tomar nota el siguiente o siguientes coordinadores de mercados, que no deben de ceder ante presiones de nadie, ni deben de mostrarse blanditos y tibios. Y en el caso de que vuelvan brindar esos espacios porque ya “de altiro” es mucha la incompetencia y el miedo, pues que ese tramo de la Calzada del Panteón lo dejen de un solo sentido, desde la esquina de donde se encuentra una refaccionaria de nombre “Rugoja”, hasta la glorieta que tiene “el monumento verde”; ese que tiene su cruz calada hasta arriba. Y luego que no está bien que yo señale a vialidad, que si “la defienden”, “que la dignifican”, “que trabajó muy bien” y no sé que tantas “cosas buenas”…sí pué.
Siempre el abuso
Porque si de valor se trata para no dejar invadir a los comerciantes, la muestra la dieron algunos locatarios de La Central de Abasto, que cuando se dieron cuenta que la gente de “El Tavo de Los Riegos” había “dado permiso” para invadir la calle interna de este mercado, la parte que desemboca sobre la 11ª calle sur poniente, para que sus agremiados y agremiadas vendieran, que los demás locatarios los van a quitar; y no a besos precisamente, pues el vacío de autoridad en este rubro es muy palpable. Por esa razón ya que ahí no pudieron, en otro lugar parte los agremiados y agremiadas de “El Tavo” invadieron el tramo de la 10ª calle sur poniente, entre bulevar y 4ª avenida poniente sur, y no es que sean otros comerciantes sin local, eran los mismos comerciantes que les dieron esos mercaditos, los que “El Tavo” puso a bloquear calles para que les dieran ese mercadito. Así, para “vender más”, sin más, ni más invadieron la calle y como el “Macondo” de los “100 años de Soledad” de Gabriel García Márquez… “no pasa nada”.
En fin que con más cosas buenas que malas, esta hermosa festividad llegó a su fin.
Es cuanto.
adriancitio@yahoo.com.mx
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