Comitán, Chis; 28 de octubre.- Un trámite burocrático durante el levantamiento armado de 1994, impidió que doña Enriqueta Gómez Yañez, pusiera en marcha un taxi de su propiedad, de acuerdo a la concesión que le otorgó el Gobierno del Estado.
El permiso que recibió del Gobierno sólo lo tuvo en sus manos, unos momentos, porque le faltaba la firma de un funcionario de Tránsito del Estado.
Un correligionario de Gómez Yáñez, identificado como Julio Penagos, salió al paso en una asamblea y sugirió que el documento fuera devuelto a Tuxtla Gutiérrez.
A partir de ese momento, la señora Gómez Yáñez inició un batalla legal, para pedir la entrega de la concesión, hasta que el gobernador del estado, Juan Sabines Guerrero, le restituyo el permiso.
En los 16 años que no tuvo el permiso en sus manos, lo que le impedió poner en funcionamiento la unidad de transporte. "Me entregaron la concesión en ina sesión pública a finales de 1994, pero nunca pude poner en marcha el taxi", dijo Gómez Yáñez que desde entonces viajo inumerables veces a Tuxtla Gutiérrez para hacer trámites en varias dependencias.
Entre las acciones jurídicas interpuso un amparo contra el gobierno del estado y solicito infinidad de audiencias en la Secretaría de Transporte y otras dependencias, pero nunca consiguió tener el permiso en sus manos de regreso.
Hace 16 años, era vigente un Reglamento para el otorgamiento de las concesiones del autotransporte, pero en la actualidad, los transportistas deben someterse a una nueva Ley.
La concesión con número 4758, es la que le tuvo en manos hace un par de meses, la señora Gómez Yáñez, pero una vez con el papel en la mano, varios transportistas reparon y exigieron su "inmediata" cancelación.
Uno de los impulsores de la medida es Daniel Sánchez García, que a acuerdo a líderes del sitio de taxis "Bicentenario de México, en agosto pasado "fue benefiado con concesiones para su esposa y uno de sus hijos".
En un documento dirigido al Subsecretario de Transportes, Jorge Alberto Rodríguez Fernández, Sánchez García, de Transportes Unidos de la Región de Comitán (Turcom) y Miguel Ángel Argüello Moreno, solicitan se proceda "en lo conducente", para quitarle el permiso de operación del taxi.
De hecho, hasta una movilización encabezó Sánchez García, con bloqueos carreteros , calles y avenidas de Comitán, hace tres semans, que dejaron tres personas muertas, con tal de pedir a la Secretaría de Transportes, le revoque el permiso a la señora Gómez Yáñez. Sánchez García argumenta que debido a que Gómez Yáñez no emplacó en 90, "como marca la Ley" vigente, entonces se le debe quitar la concesión.
Sin embargo, la transportista alega que en este caso la Ley no es retroactiva, por lo que considera que la petición de Sánchez García no es procedente. Incuso dice que si realemente se quiere hacer "justicia", que se cancelen los permisos de traxis que les otorgaron al hijo y esposa de Sánchez García.
-¿Porqué tanto odio de estos trnasportistas contra una mujer como usted?, se le pregunta a Gómez Yáñez. -No sé porque actúa de esta forma este señor, pero mañosamente su esposa y un hijo tiene concesiones para operar taxis, además de que a él nunca se le visto manejando el taxi de su propiedad, por lo que no puede considearse un transportista como tal. Ahora la señora Gómez Yáñez espera que si se quiere cumplir la Ley, que se someta a revisión el caso de Sánchez García, que tiene en su poder al menos tres concesiones para operar taxis, aunque él, su esposa e hijo, "nunca se le haya visto manejando un vehículo de transporte público".
El permiso que recibió del Gobierno sólo lo tuvo en sus manos, unos momentos, porque le faltaba la firma de un funcionario de Tránsito del Estado.
Un correligionario de Gómez Yáñez, identificado como Julio Penagos, salió al paso en una asamblea y sugirió que el documento fuera devuelto a Tuxtla Gutiérrez.
A partir de ese momento, la señora Gómez Yáñez inició un batalla legal, para pedir la entrega de la concesión, hasta que el gobernador del estado, Juan Sabines Guerrero, le restituyo el permiso.
En los 16 años que no tuvo el permiso en sus manos, lo que le impedió poner en funcionamiento la unidad de transporte. "Me entregaron la concesión en ina sesión pública a finales de 1994, pero nunca pude poner en marcha el taxi", dijo Gómez Yáñez que desde entonces viajo inumerables veces a Tuxtla Gutiérrez para hacer trámites en varias dependencias.
Entre las acciones jurídicas interpuso un amparo contra el gobierno del estado y solicito infinidad de audiencias en la Secretaría de Transporte y otras dependencias, pero nunca consiguió tener el permiso en sus manos de regreso.
Hace 16 años, era vigente un Reglamento para el otorgamiento de las concesiones del autotransporte, pero en la actualidad, los transportistas deben someterse a una nueva Ley.
La concesión con número 4758, es la que le tuvo en manos hace un par de meses, la señora Gómez Yáñez, pero una vez con el papel en la mano, varios transportistas reparon y exigieron su "inmediata" cancelación.
Uno de los impulsores de la medida es Daniel Sánchez García, que a acuerdo a líderes del sitio de taxis "Bicentenario de México, en agosto pasado "fue benefiado con concesiones para su esposa y uno de sus hijos".
En un documento dirigido al Subsecretario de Transportes, Jorge Alberto Rodríguez Fernández, Sánchez García, de Transportes Unidos de la Región de Comitán (Turcom) y Miguel Ángel Argüello Moreno, solicitan se proceda "en lo conducente", para quitarle el permiso de operación del taxi.
De hecho, hasta una movilización encabezó Sánchez García, con bloqueos carreteros , calles y avenidas de Comitán, hace tres semans, que dejaron tres personas muertas, con tal de pedir a la Secretaría de Transportes, le revoque el permiso a la señora Gómez Yáñez. Sánchez García argumenta que debido a que Gómez Yáñez no emplacó en 90, "como marca la Ley" vigente, entonces se le debe quitar la concesión.
Sin embargo, la transportista alega que en este caso la Ley no es retroactiva, por lo que considera que la petición de Sánchez García no es procedente. Incuso dice que si realemente se quiere hacer "justicia", que se cancelen los permisos de traxis que les otorgaron al hijo y esposa de Sánchez García.
-¿Porqué tanto odio de estos trnasportistas contra una mujer como usted?, se le pregunta a Gómez Yáñez. -No sé porque actúa de esta forma este señor, pero mañosamente su esposa y un hijo tiene concesiones para operar taxis, además de que a él nunca se le visto manejando el taxi de su propiedad, por lo que no puede considearse un transportista como tal. Ahora la señora Gómez Yáñez espera que si se quiere cumplir la Ley, que se someta a revisión el caso de Sánchez García, que tiene en su poder al menos tres concesiones para operar taxis, aunque él, su esposa e hijo, "nunca se le haya visto manejando un vehículo de transporte público".
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