Comitán, Chis; 22 agosto.-La inmigración de menores originarios de El Salvador y Honduras que intentan llegar a los Estados Unidos, ha ido en aumento en los últimos meses, reconoció Martín Santiago Meléndez, Oficial de Protección a la Infancia del Instituto Nacional de Migración (INM).Y es que dijo que dicha situación ha crecido por la situación de pobreza que se vive en esos países, lo que orilla a que los menores busquen mejores condiciones de vida en los Estados Unidos.
Además de que parte de ellos, deciden migrar al norte del país para buscar a sus familiares para refugiarse y emprender una nueva vida, sin importar los riesgos que corren durante el éxodo.
El funcionario dijo que la mayoría de los menores viajan solos y son de edades entre los 12 y 17 años de edad.
Dio a conocer que en los últimos días se detuvieron entre 8 y 9 niños, alguno de ellos viajan solos y otros acompañados de algún familiar, sin que se haya detectado casos de trata de personas.
La dependencia a su cargo trabaja para protección de los menores detenidos y en coordinación con los respectivos consulados, pero explicó “Sí el menor viene solo, tarda un poco más la deportación, porque los menores son llevados a un albergue de su país en la espera que sea reclamado por un familiar que acredite su parentesco para así ser entregado”.
Puntualizó que el proceso de repatriación de menores llega a darse en un lapso de una semana cuando sucede en esta región fronteriza, debido a que las conducciones se van hasta Tapachula, pero con todas las protecciones y garantías necesarias.
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