F. Darinel
Corro por el camino de tus mandamientos,
porque me diste generosidad de corazón.
Señor, enséñame la senda de tus preceptos
y hazme caminar hasta el fin por ella.
Sal. 119 ver 32, 33
“VIEJO Y CONOCIDO”
LOS CAMINOS DE HOY
Dos días
Hoy estamos a escasas 48 horas de que los comicios se lleven a cabo, de que la sumatoria de los esfuerzos políticos rindan sus frutos y de que al final de esta jornada conozcamos los que han obtenido el triunfo y los que han sido derrotados, y esto hay que enfatizarlo, en los comicios solo se conocen a los ganadores, porque infortunadamente en política no hay segundos lugares generosos, ni aquello de “por un pelito”, o “por poquito nos ganaron” y pasarse la vida vanagloriándose de esto toda la vida, aquí se trata de triunfo y derrota. Por eso mismo, como nadie quiere sucumbir, bien decía un amigo mío y compañero del PRI allá en el D.F.: “En la guerra, en el amor y en la política todo se vale, menos perder”.
“Medios”
Esa es la cruda y sencilla realidad, nadie quiere perder, y como nadie quiere perder –hablando de política, que es lo que hacemos- entonces se echa mano de diversas “armas”; pero armas en el buen entendido, porque creo que por esto y confundido por lo mismo, Don Martín Gordillo de Tzimol armó a su grupo de “chinacos” que asolan la región.
Comentaba pues que se echa mano de diversos “métodos”; “métodos” que para el común de la gente no son para nada extraños, ni ajenos, más aun con las personas de las comunidades rurales, de las cuales de forma desgarradora el analista Erick Guerrero Rosas dice: “Para qué hacernos tontos, hay que aceptarlo, el campesinado en México solo sirve para una cosa, para votar”, conclusión con la que no estoy de acuerdo, aun a pesar que en la realidad de los hechos, es a donde más dirigen sus “fuerzas” los políticos, pues en la zonas urbanas cada vez es menor, aunque no ha dejado de existir, ya que para aquellos que afirman que la zonas urbanas son “incomprables”, eso no es cierto, pues hay que aceptar una primera verdad: lo que más hay en México son pobres y necesidad hay mucha, y más aun; querámoslo o no, existe un hartazgo, una falta de confianza hacia las autoridades, una falta de credibilidad para las instituciones electorales y para los procesos, que el sufragio no se le da en muchísimos casos ese valor agregado del que se habla y se discute, solo se ve como una buena oferta para comer bien “un tiempecito”, porque la realidad conceptual nos dice que haya ganado, quien haya ganado, siguen igual de jodidos, así que: qué más da que “por algo” se pueda estar bien una corta temporada.
No nos hagamos
Por eso pensar que todos los votos llegan a las urnas por ideales y por convicciones, es una utopía, aunque no dejan de existir las verdaderas convicciones y una gran masa que cree aun en que podemos cambiar, aun a costa de muchas penurias; yo soy uno de esos.
Las elecciones están a la vuelta de la esquina, y todavía hay quienes siguen “creyendo a píe juntillas”, que esa masa de necesitados con solo una dádiva o recompensa se ganan y que solo es dinero el medio para ganar, de lo cual buena parte de esto es cierto, pero existe otra parte a la que no han llegado y que aun no conocen y que jamás conocerán, ya que si persisten en esta creencia, se darán cuenta con el paso del tiempo, que el ofrecer únicamente dinero y obtener “lo deseado” con solo dinero, únicamente los convierte en comerciantes, de los cuales, tarde o temprano “sus compradores” se hartaran y buscarán a aquellos que no solo les ofrezcan una temporal solución a sus problemas, sino que aparte de esto se conduelan y se integren con un pequeño abrazo, con una pequeña sonrisa, con una pequeña palmada, con unas cuantas palabras de aliento y que de verdad y en cierta medida, tengan algún deseo de ayudarlos.
Cinismo
Ya no es tiempo de adoptar ridículas actitudes mojigatas, ni de hacernos los espantados y ser “mochos de la política”, la forma y la realidad la conocemos, y aunque es una tristeza que exista, hasta el momento nada podemos hacer para pararlo, más aun cuando la gente más pobre, cada día está más acostumbrada y doblegada con fortísimos programas paternalistas, que desde hace mucho les han enseñado y les han formado como un neo-concepto cultural, que todo debe de ser regalado, que inclusive los trabajos para el bien de sus propias comunidades “el gobierno debe de pagarlo”, como el famosísimo PET comunitario (Programa de Empleo Temporal) del ramo 33. Pues así menos.
Pero bueno, ante esta realidad, cruda o cotidiana, las cosas así se dan, unos son puros “regalos y apoyos” y otros “apoyos y palmada”, y nada ha cambiado desde hace mucho. En tanto algunos ya no les preocupa para nada esto, a plena luz del día hacen esos “regalos”, como Darinel Alvarado, que el día de ayer en la comunidad Álvaro Obregón le detuvieron una camionada de “apoyos”, los que ya no llegarán a los “destinatarios”, y que al ya no entregarse, por la triste realidad de “mal acostumbrados” de “me das apoyo, te doy mi voto”, son un duro revés para sus aspiraciones, pues son una buena, una muy buena cantidad de votos perdidos y que confirman que se encuentra a pocas horas de la derrota, más ahora que las investigaciones ya se abrieron y que está “bien sobres” la FEPADE.
Este error, este descaro, estas actitudes cínicas, son una muestra de cómo y en qué concepto se tiene a la población muy pobre, pero ese tipo de errores en contiendas políticas se pagan con un revés.
Ya sabemos, ya conocemos, “sabemos de qué píe cojean”, solo que como dice el refrán comiteco: “Hay que ser cuch, pero no tan trompudo”
ALGUNAS VEREDAS
Desde las diez
Tenía tanto tiempo que los comitecos añoraban una oportunidad así, donde los jóvenes que quedaron libres de clases en la mañana –bueno más que a partir de ahora que tienen todo el día libre niños y jóvenes por sus vacaciones de verano- los visitantes que vinieron de compras y terminaron temprano de hacerlas; los que vinieron por tramites y estos se realizaron en menos tiempo de lo estimado y culminaron exitosamente; o que sencillamente están de paseo en la ciudad; o simplemente para aquellos que tienen tiempo para divertirse por la mañana, la noticia es que si no saben a dónde ir, la opción es divertirse con el 7º arte, el cine, el cual en el conjunto del “Grupo Cinépolis” de la “Plaza Las Flores”, pueden disfrutar desde las 10:30 de la mañana las películas de estreno y mayor éxito mundial. Y por si Usted; amable lector, no lo sabía, pues riegue la voz que ya podemos divertirnos desde temprano. Claro está, si hay tiempo y con responsabilidad.
De interés
Mi correo electrónico; recomento, se llama; y para dejarlo en claro: “a d r i a n c i t i o”, un diminutivo bien cositía del nombre “Adrián”; pero sin acento en la última “i”, porque ya saben Ustedes; amables lectores, que en los nombres de los correos electrónicos ese tipo de cuestiones gramaticales no se pueden adicionar, y también repetir que no es “adriancito”, el diminutivo correcto y normal, razón por la que muchas opiniones que han intentado enviarme no han llegado, dada esa confusión que en la lectura del nombre del correo se ha dado.
“Yaya”
Ayer, niña linda cumpliste, lo que para los gringos son: “los dulces dieciséis”, y aun me sigue asombrando tu delicada inocencia, tu aparente rebeldía y tu camuflada obediencia. Ayer nuevamente me sorprendí cómo estoy de viejo y cuánto has crecido, cuánto tiempo ha pasado… y te veo; te recuerdo pequeña, y todavía me resisto a ver a la jovencita en la que te has convertido, pero ya eres toda una hermosa señorita, una blanca flor de julio creciendo y bañada de temporal.
Dios te bendiga, te de muchos años, que te lleve muy viejita y que en el resto de años que te faltan por vivir, que seas siempre muy feliz.
Es cuanto.
adriancitio@yahoo.com.mx
Corro por el camino de tus mandamientos,
porque me diste generosidad de corazón.
Señor, enséñame la senda de tus preceptos
y hazme caminar hasta el fin por ella.
Sal. 119 ver 32, 33
“VIEJO Y CONOCIDO”
LOS CAMINOS DE HOY
Dos días
Hoy estamos a escasas 48 horas de que los comicios se lleven a cabo, de que la sumatoria de los esfuerzos políticos rindan sus frutos y de que al final de esta jornada conozcamos los que han obtenido el triunfo y los que han sido derrotados, y esto hay que enfatizarlo, en los comicios solo se conocen a los ganadores, porque infortunadamente en política no hay segundos lugares generosos, ni aquello de “por un pelito”, o “por poquito nos ganaron” y pasarse la vida vanagloriándose de esto toda la vida, aquí se trata de triunfo y derrota. Por eso mismo, como nadie quiere sucumbir, bien decía un amigo mío y compañero del PRI allá en el D.F.: “En la guerra, en el amor y en la política todo se vale, menos perder”.
“Medios”
Esa es la cruda y sencilla realidad, nadie quiere perder, y como nadie quiere perder –hablando de política, que es lo que hacemos- entonces se echa mano de diversas “armas”; pero armas en el buen entendido, porque creo que por esto y confundido por lo mismo, Don Martín Gordillo de Tzimol armó a su grupo de “chinacos” que asolan la región.
Comentaba pues que se echa mano de diversos “métodos”; “métodos” que para el común de la gente no son para nada extraños, ni ajenos, más aun con las personas de las comunidades rurales, de las cuales de forma desgarradora el analista Erick Guerrero Rosas dice: “Para qué hacernos tontos, hay que aceptarlo, el campesinado en México solo sirve para una cosa, para votar”, conclusión con la que no estoy de acuerdo, aun a pesar que en la realidad de los hechos, es a donde más dirigen sus “fuerzas” los políticos, pues en la zonas urbanas cada vez es menor, aunque no ha dejado de existir, ya que para aquellos que afirman que la zonas urbanas son “incomprables”, eso no es cierto, pues hay que aceptar una primera verdad: lo que más hay en México son pobres y necesidad hay mucha, y más aun; querámoslo o no, existe un hartazgo, una falta de confianza hacia las autoridades, una falta de credibilidad para las instituciones electorales y para los procesos, que el sufragio no se le da en muchísimos casos ese valor agregado del que se habla y se discute, solo se ve como una buena oferta para comer bien “un tiempecito”, porque la realidad conceptual nos dice que haya ganado, quien haya ganado, siguen igual de jodidos, así que: qué más da que “por algo” se pueda estar bien una corta temporada.
No nos hagamos
Por eso pensar que todos los votos llegan a las urnas por ideales y por convicciones, es una utopía, aunque no dejan de existir las verdaderas convicciones y una gran masa que cree aun en que podemos cambiar, aun a costa de muchas penurias; yo soy uno de esos.
Las elecciones están a la vuelta de la esquina, y todavía hay quienes siguen “creyendo a píe juntillas”, que esa masa de necesitados con solo una dádiva o recompensa se ganan y que solo es dinero el medio para ganar, de lo cual buena parte de esto es cierto, pero existe otra parte a la que no han llegado y que aun no conocen y que jamás conocerán, ya que si persisten en esta creencia, se darán cuenta con el paso del tiempo, que el ofrecer únicamente dinero y obtener “lo deseado” con solo dinero, únicamente los convierte en comerciantes, de los cuales, tarde o temprano “sus compradores” se hartaran y buscarán a aquellos que no solo les ofrezcan una temporal solución a sus problemas, sino que aparte de esto se conduelan y se integren con un pequeño abrazo, con una pequeña sonrisa, con una pequeña palmada, con unas cuantas palabras de aliento y que de verdad y en cierta medida, tengan algún deseo de ayudarlos.
Cinismo
Ya no es tiempo de adoptar ridículas actitudes mojigatas, ni de hacernos los espantados y ser “mochos de la política”, la forma y la realidad la conocemos, y aunque es una tristeza que exista, hasta el momento nada podemos hacer para pararlo, más aun cuando la gente más pobre, cada día está más acostumbrada y doblegada con fortísimos programas paternalistas, que desde hace mucho les han enseñado y les han formado como un neo-concepto cultural, que todo debe de ser regalado, que inclusive los trabajos para el bien de sus propias comunidades “el gobierno debe de pagarlo”, como el famosísimo PET comunitario (Programa de Empleo Temporal) del ramo 33. Pues así menos.
Pero bueno, ante esta realidad, cruda o cotidiana, las cosas así se dan, unos son puros “regalos y apoyos” y otros “apoyos y palmada”, y nada ha cambiado desde hace mucho. En tanto algunos ya no les preocupa para nada esto, a plena luz del día hacen esos “regalos”, como Darinel Alvarado, que el día de ayer en la comunidad Álvaro Obregón le detuvieron una camionada de “apoyos”, los que ya no llegarán a los “destinatarios”, y que al ya no entregarse, por la triste realidad de “mal acostumbrados” de “me das apoyo, te doy mi voto”, son un duro revés para sus aspiraciones, pues son una buena, una muy buena cantidad de votos perdidos y que confirman que se encuentra a pocas horas de la derrota, más ahora que las investigaciones ya se abrieron y que está “bien sobres” la FEPADE.
Este error, este descaro, estas actitudes cínicas, son una muestra de cómo y en qué concepto se tiene a la población muy pobre, pero ese tipo de errores en contiendas políticas se pagan con un revés.
Ya sabemos, ya conocemos, “sabemos de qué píe cojean”, solo que como dice el refrán comiteco: “Hay que ser cuch, pero no tan trompudo”
ALGUNAS VEREDAS
Desde las diez
Tenía tanto tiempo que los comitecos añoraban una oportunidad así, donde los jóvenes que quedaron libres de clases en la mañana –bueno más que a partir de ahora que tienen todo el día libre niños y jóvenes por sus vacaciones de verano- los visitantes que vinieron de compras y terminaron temprano de hacerlas; los que vinieron por tramites y estos se realizaron en menos tiempo de lo estimado y culminaron exitosamente; o que sencillamente están de paseo en la ciudad; o simplemente para aquellos que tienen tiempo para divertirse por la mañana, la noticia es que si no saben a dónde ir, la opción es divertirse con el 7º arte, el cine, el cual en el conjunto del “Grupo Cinépolis” de la “Plaza Las Flores”, pueden disfrutar desde las 10:30 de la mañana las películas de estreno y mayor éxito mundial. Y por si Usted; amable lector, no lo sabía, pues riegue la voz que ya podemos divertirnos desde temprano. Claro está, si hay tiempo y con responsabilidad.
De interés
Mi correo electrónico; recomento, se llama; y para dejarlo en claro: “a d r i a n c i t i o”, un diminutivo bien cositía del nombre “Adrián”; pero sin acento en la última “i”, porque ya saben Ustedes; amables lectores, que en los nombres de los correos electrónicos ese tipo de cuestiones gramaticales no se pueden adicionar, y también repetir que no es “adriancito”, el diminutivo correcto y normal, razón por la que muchas opiniones que han intentado enviarme no han llegado, dada esa confusión que en la lectura del nombre del correo se ha dado.
“Yaya”
Ayer, niña linda cumpliste, lo que para los gringos son: “los dulces dieciséis”, y aun me sigue asombrando tu delicada inocencia, tu aparente rebeldía y tu camuflada obediencia. Ayer nuevamente me sorprendí cómo estoy de viejo y cuánto has crecido, cuánto tiempo ha pasado… y te veo; te recuerdo pequeña, y todavía me resisto a ver a la jovencita en la que te has convertido, pero ya eres toda una hermosa señorita, una blanca flor de julio creciendo y bañada de temporal.
Dios te bendiga, te de muchos años, que te lleve muy viejita y que en el resto de años que te faltan por vivir, que seas siempre muy feliz.
Es cuanto.
adriancitio@yahoo.com.mx
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