Casas de empeño ayudan a ladronas

Comitán, Chis; 14 de octubre.- Luego de ser descubierta y plenamente identificada una mujer, que supuestamente ofrecía sus servicios como empleada doméstica, fue conocida la manera de cómo operan, en contubernio, con algunas casas de empeño.

Lo anterior se conoció, después que una de las dos familias afectadas que lograron descubrir a las mujeres que les habían robado y que luego empeñaron las alhajas robadas en una casa de préstamo, notaron que en el contrato de préstamo una de estas ladronas había falseado su nombre verdadero por un alias, sin que la casa de préstamo le exigiera una identificación oficial.

Y es que hasta las puertas de la casa de esta familia, se presentó a trabajar como empleada doméstica una mujer que responde al nombre de Reyna Adriana Cruz Pérez, misma que después de huir con el lote joyas, inmediatamente para obtener ganancias de lo robado, empeñó las joyas en una casa de préstamo.

Luego de ser rastreada por una llamada que pidió se le realizará, se descubrió que su domicilio verdadero se encuentra en el barrio San Miguel, pues esta mujer con antelación había dicho a los dueños de la casa que vivía en el barrio El Cedro.

Una vez que con cinismo negó conocer a los afectados, estando delante de ellos, y luego de que fue amenazada de ser denunciada ante el Ministerio Público, confesó que lo robado lo había empeñado en una casa de préstamo conocida con el nombre de PRENDAMEX.

Con el contrato de préstamo en la mano, los afectados notaron que este se encontraba a favor de “MARIA TERESA GARCIA XX”, que es el alias con que Reyna Adriana Cruz Pérez se identificaba, sin que esta casa de empeño le solicitara identificación personal oficial, que es uno de los requisitos que deben cubrir los pignorantes para que les sea autorizado el empréstito y demuestren que lo empeñado es de su propiedad.

Sin embargo esta casa de préstamo, cuya sucursal de la Central de Abasto fue quien autorizó el préstamo y cuya razón social es “PRENDAMEX, SERVICIOS FINANCIEROS DEL GOLFO”, aun sin cubrir la obligación anteriormente mencionada, omisión que marcó con letra en el mismo contrato, es decir la falta de la identificación, dio en préstamo a esta mujer dinero que ascendía a más de 5 mil pesos.

Ahí mismo dijeron que esta mujer no le solicitaban identificación por ser una “buena clienta frecuente”, ya que en muchas ocasiones anteriores ha llegado con otros lotes de joyas de consideración, a solicitar los servicios de préstamo de esta empresa.

Una vez que obligaron los afectados a esta mujer a desempeñar sus joyas, notaron que de sus ropas sacó unos billetes para pagar el préstamo, sin embargo algunos de los cuales, que eran de 500 pesos, eran clara y notoriamente falsos.

Los afectados lograron obtener una fotografía de esta ladrona y solicitaron a este rotativo que se publicara, para que algunas otras familias que hayan sido afectadas por sus hurtos la identifiquen y denuncien, y en su caso logren recuperar sus bienes o en su defecto sea encarcelada esta falsa trabajadora doméstica, así como exigir se vigile el sistema de préstamo sobre alhajas que ha solapado a estas ladronas.