LA REGION PASTORAL PACIFICO SUR ANTE LA SITUACION DE OAXACA
“Nos visitará el Sol que nace de lo alto, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz” (Lc 1,78-79).
Los obispos de Oaxaca y Chiapas, reunidos con sacerdotes, religiosas, religiosos, laicas y laicos de la Región Pacífico Sur, para dialogar y analizar las implicaciones que tiene la inculturación del Evangelio y de la Iglesia en las diferentes áreas de pastoral de nuestras diócesis, hemos dedicado un tiempo para reflexionar sobre la situación que se vive en Oaxaca, y consideramos oportuno compartir con las comunidades cristianas y personas de buena voluntad lo siguiente:
No podemos, por exigencia evangélica, permanecer indiferentes ante el sufrimiento de tantas personas que padecen ya largos meses de incertidumbre y angustia, situación que se ha venido gestando desde hace décadas. La corrupción a todos los niveles, el caciquismo, los asesinatos, la impunidad, la persecución, las cárceles, el desempleo, las distintas formas de violencia y vandalismo, la destrucción, las divisiones y confrontaciones agresivas, son un llamado a nuestra conciencia para preguntarnos hasta dónde ha calado el Evangelio en la vida diaria de nuestros pueblos, pues lo que se está viviendo no es conforme con la voluntad de nuestro Padre Dios, quien desea una vida digna para todos y que convivamos como hermanos, respetándonos unos a otros.
Somos conscientes de que no es sencillo analizar el conflicto actual, pues se mezclan muchas intenciones y hay muchos intereses particulares y de grupos. Reconocemos que, en el fondo, hay muchas situaciones de injusticia, que violentan permanentemente la convivencia social; pareciera que no queda otro remedio que soportar las arbitrariedades de una estructura social, económica y política que lesiona gravemente los derechos fundamentales de las personas, en particular de los más pobres y excluidos. La insurrección de 1994 en Chiapas, la situación actual en Oaxaca, la migración añeja y reciente y otros conflictos de nuestros Estados, son síntomas claros de una injusticia estructural. Mientras no se hagan, con la colaboración de todos los sectores, las reformas legales, económicas, políticas, educativas, electorales y sociales, que con urgencia reclama el momento, siempre seguirá latente el peligro de nuevos brotes de violencia que amenacen la paz social.
Por nuestra parte, ofrecemos los criterios del Evangelio, que iluminan a todos los implicados, para construir la vida y la dignidad de las personas y de los pueblos, y señalar con firmeza lo que las destruya. No podemos identificarnos absolutamente con todo lo que hace y dice alguna de las partes. Nuestra única y suprema opción es por Jesucristo, por su Reino. Queremos que su Palabra guíe nuestros criterios y decisiones. Y su primera llamada es a la conversión. Convirtámonos, para que haya justicia, verdad, reconciliación, paz y amor. Mientras cada quien no reconozca sus errores y sólo condene a los otros, no es posible ninguna solución.
Hacemos un llamado urgente a las partes en conflicto, para que den muestras de respeto mutuo, evitando más daños al pueblo oaxaqueño. Hay que privilegiar la escucha humilde, el diálogo inteligente, el discernimiento evangélico y los métodos no violentos. Es tiempo de demostrar la generosidad del corazón, cediendo en aquellas actitudes cerradas que hacen imposible avanzar en la solución del problema. Lo que importa es el bien común, no defender una posición personal o de grupo que haga más graves los sufrimientos de la comunidad. La paz social, enraizada en la justicia y en la verdad, es un valor de primer orden, para quien busca el bienestar de un pueblo.
Insistimos a las autoridades federales y estatales, a los legisladores, a los líderes de grupos y organizaciones, a los maestros, a los empresarios, comerciantes y dirigentes sociales, a ser sensibles ante los reclamos justos del pueblo, gobernar con honestidad y transparencia, no abusar del poder para reprimir, no manipular ni lucrar con la ignorancia y la pobreza de la gente. ¿Se han preguntado en conciencia si su forma de proceder y los métodos que han utilizado están inspirados en un genuino deseo servir al pueblo, y si son coherentes con las propuestas y demandas de justicia que se hacen?
Reconocemos la importancia de los medios informativos, de los cuales esperamos que sean objetivos y veraces. El pueblo los necesita para construir un país en donde todos nos comprometamos en la justicia, la paz y la reconciliación, sin abonar más a la confrontación que nos destruye.
Pedimos a los sacerdotes, a las religiosas y demás agentes de pastoral, que se mantengan muy cerca de su pueblo, con el corazón dispuesto a acoger los sufrimientos de los pobres, con la mente despierta para discernir con el Evangelio las actitudes de las partes en conflicto, y con la invitación permanente al perdón, a la reconciliación y a la unidad entre los hijos de un mismo pueblo. Nadie puede ser indiferente ante esta realidad. Sólo así seremos fieles discípulos de Jesús y nuestros pueblos tendrán vida plena en El.
En este momento coyuntural de cambio en el gobierno federal, invitamos a las comunidades cristianas a intensificar su oración, para que se nos conceda a todos el Espíritu de sabiduría e inteligencia, y hagamos lo que nos corresponde, pues la construcción de un nuevo pacto social no es tarea exclusiva de los gobernantes, sino que nos involucra a todos.
Al iniciar el Adviento, tiempo de gracia y de esperanza, ponemos a Oaxaca, a Chiapas y a todo nuestro país en el corazón materno de Santa María de Guadalupe, para que los moradores de estas tierras construyamos la casa común, donde nos podamos sentir todos hermanos.
Tehuantepec, Oax., 29 de noviembre de 2006
+ José Luis Chávez Botello + Rogelio Cabrera López
Arzobispo de Antequera-Oaxaca Arzobispo de Chiapas
+ Leopoldo González González + Felipe Padilla Cardona
Obispo de Tapachula Obispo de Tehuantepec
+ Eduardo Carmona Ortega + José Antonio Fernández
Obispo de Puerto Escondido Obispo de Tuxtepec
+ Felipe Arizmendi Esquivel + Héctor Luis Morales
Obispo de San Cristóbal LC Obispo Prelado de Huautla
+ Enrique Díaz Díaz + José Refugio Mercado Díaz
Obispo Auxiliar de SCLC Obispo Auxiliar de Tehuantepec
+ Oscar Campos Contreras R. P. Pedro González, SDB
Obispo Auxiliar de Antequera-Oaxaca Administrador de la Prelatura Mixe
Firmas de los Vicarios Episcopales de Pastoral, de los responsables de las Areas de Pastoral y demás participantes de las diócesis y prelaturas:
miércoles, noviembre 29, 2006
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