Gabriela CoutiñoSan Cristóbal de las Casas, Chis; 2 de noviembre.- Indígenas de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) Región Carranza, se mantienen apostados en las oficinas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en San Cristóbal de las Casas, informó hoy un portavoz de la ONU.
El representante Residente Adjunto del PNUD en México, Arnaud Peral, dijo en conferencia de prensa que esperan poder reanudar rápidamente sus actividades laborales que llevan a cabo, por lo que demandan la liberación inmediata de la oficina. “así como el respeto a la inviolabilidad de las mismas, y del no uso de la fuerza para desalojar a los ocupantes”.
Peral agregó que Oscar Torrens, negociador del PNUD, está por recibir el pliego petitorio del grupo ocupante, el que será turnado a las autoridades del gobierno de Chiapas.
Los manifestantes, que pertenecen a la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ) ingresaron el pasado viernes a las oficinas del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en el centro de la colonial ciudad de San Cristóbal de las Casas, se apostaron en el patio y pasillos del inmueble.
Los campesinos exigen el retiro del Ejército y la policía de sus comunidades en el municipio de Venustiano Carranza, y la libertad de tres de sus líderes, por lo cual mantienen bajo improvisadas carpas un plantón desde hace siete días en la plaza central, a tres calles de la sede de la ONU.
En rueda de prensa Arnaud Peral, reiteró su absoluta disponibilidad para facilitar el diálogo de los ocupantes con el gobierno federal y estatal, y encontrar una salida negociada y pacífica a la ocupación.
Señaló que en una reunión con el secretario de gobierno estatal, el gobierno de Chiapas también subrayó que continuarán respetando la inviolabilidad de las oficinas de la ONU.
Los tzotziles originarios de dos comunidades del municipio de Venustiano Carranza, se desplazaron hacia San Cristóbal de las Casas, luego de que fuerzas de seguridad ingresaron a sus poblados para detener a tres líderes a quienes el gobierno de Chiapas acusa de utilizar la organización social para el tráfico de armas y droga.
La Organización Campesina Emiliano Zapata, mantiene una larga historia de lucha social por la tenencia de la tierra en Chiapas.
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