Los costos de la migración

En endurecimiento de la política migratoria por parte de los Estados Unidos ha provocado lamentables desenlaces que no hay que dejarlos pasar así simplemente. En las últimas horas, dos grupos de mexicanos fueron baleados. Sólo uno de los casos ha sido clarificado hasta ahora, el de un grupo de campesinos de Sinaloa, que fueron agredidos por un agente policíaco.
Otro caso fue el de un grupo de 15 personas originario de Tzimol que fue atacado, al parecer por un grupo de asaltantes o polleros, pero esta hipótesis que han manejado allá en los Estados Unidos, no cobran seriedad, porque no les robaron nada.
Este lamentable percance cobró la vida de dos personas: José Antonio Pérez Pérez y Consuelo Pérez Román, de 30 y 28 años de edad, que orillados por la falta de empleos decidieron emigrar hacia la nación del norte. Pérez Pérez un constructor de casas y albercas en Uninajab, ya había estado en dos ocasiones la nación del norte y ahora quería permanecer más tiempo en ese país y por eso había llevado su esposa e hijos.
Lamentablemente, cuando habían terminado de traspasar el desierto de Arizona, que inicia en Sasabé, Sonora.
Resulta triste que los mexicanos sean objeto de agresiones. No tardará mucho para que los migrantes sean tomados en cuenta en esa nación, como lo han tenido los demás grupos que viven ahí. Creemos que hemos entrado a una etapa donde los migrantes empiezan a consolidarse y establecerse en la nación del norte. José Antonio era uno de los hombres que pensaban construir su futuro en los Estados Unidos, pero una bala le arrebató el sueño.