Sandra
de los Santos
Cuando Ossiel Gómez Torres dejó
a su hija con la ministerio público María de los Ángeles Roque Ruíz para que la
llevara a declarar creyó que la denuncia en su contra sobre maltrato familiar
sería aclarada y que ella podría llevarse a su hija Valentina en unas horas y
seguir su vida normal. No fue así. Desde ese día, 16 de marzo del 2012, no ha
vuelto a ver a su hija.
En marzo del 2012 Ossiel fue
denunciada por su ex pareja, Luis Roberto García Palacios por violencia
familiar en contra de la hija de ambos, Valentina, quien en ese entonces tenía
dos años y ocho meses. Debido a la denuncia Ossiel se presentó junto con la
niña para declarar.
“Cuando recibí el citatorio me
presenté a declarar sola, pero me dijeron que tenía que ir con la niña, regresé
con Valentina y me dijeron que tenía ella que declarar sola y que le haría unos
exámenes para determinar si sufría de violencia. Se la entregué a la ministerio
público María de los Ángeles Roque Cruz y cuando regresé me dijo que se la
había entregado a su papá y desde ese entonces no he vuelto a ver a mi hija”
narró Ossiel.
La Ministerio Público fue
sancionada y el Juzgado Segundo Distrito de Procesos Penales Federales
determinó que no existían pruebas para determinar que Ossiel Gómez Torres haya
incurrido en el delito de violencia familiar en contra de su hija.
De acuerdo a los documentos que
muestra Ossiel y su relato las pruebas que se mostraron para denunciarla fueron
infundadas y algunas de ellas se atreve a decir que hasta alteradas.
A pesar de la determinación del
juzgado, ella sigue sin poder ver a su hija y la guarda y custodia de la niña
continúa en litigio.
Ossiel pidió a los magistrados
del Poder Judicial del Estado solucionar el caso a su favor y es que dice que
por una negligencia de una Ministerio Público no ha podido ver a su hija
durante un año y ocho meses. “No me importa que hayan sancionado a la
Ministerio Público porque eso no me devuelve a mi hija, lo que quiero es que me
la regresen, que no se cometa otra injusticia”.
Gómez Torres ignora el paradero
de su hija. Lo único que sabe es que está con su papá y que ella ahora tiene
que lidiar con abogados, jueces, papeles para poder volverla a ver
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