“Fin de la Intervención Francesa en México”
Por el Dr. Roque Gil Marín Vassallo.
Contaba mi Abuelo materno Maestro Miguel Lara Vassallo, Autor de la Música de nuestro Glorioso Himno a Chiapas, que cuando fué soldado del Ejército de Don Porfirio Díaz, sus Comandantes militares le contaban historias de epopeyas de sus vidas al servicio de las armas nacionales, en las que Don Porfirio fué el Comandante de los Ejércitos del Sur en la defensa de la Soberanía Nacional y de la dignidad del gobierno legítimo que presidía Don Benito Juárez; y decía que, cuantas veces el General Díaz resultaba vencedor de los enemigos de la Patria, al momento de rendir el parte militar ante el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas nacionales, Don Porfirio decía jubilosamente en voz fuerte y emocionada: “El Triunfo es de la patria, la Victoria es suya, Señor Presidente Juárez”.
Esto nos lleva a la historia verdadera que a continuación les expongo y que dice Así:
“Debido a la gran pobreza y retrazo que el pueblo mexicano padecía como producto de la Guerra de la Reforma, el Presidente Benito Juárez mediante decreto aprobado por el H. Congreso de la Nación de fecha 17 de Julio de 1,861, decide suspender por dos años el pago de la deuda pública y las asignaciones extranjeras lo que provocó la llamada “Intervención Francesa en México” la que tuvo dos fases, siendo la primera el rechazo de la deuda tanto de Francia como de Inglaterra y España que firmaron lo que se llama “Convención de Londres” el 31 de Octubre de 1,861, convención que se disolvió porque el Emperador Napoleón III “El Pequeño” la quiso manipular en beneficio exclusivo de Francia, por lo que, el 9 de Abril de 1,862 se separan de Francia tanto Inglaterra como España porque éstas aceptaron las razones del gobierno mexicano para ya no intervenir militarmente en México.”
La segunda fase fue la confirmación de las razones del retiro de Inglaterra y España de la Triple Alianza, y consistió en que Napoleón III, primo hermano de la Princesa de Bélgica Carlota Amalia, esposa de Maximiliano, que trató de implantar la Monarquía Francesa en México, auspiciando a un grupo de “Notables Mexicanos” para que ofrecieran el Trono del Reino de México a su pariente político que recibió el 10 de abril de 1,864 en Miramar,
cerca de la Ciudad austriaca de Trieste a este grupo, y el archiduque de Austria Fernando Maximiliano de Habsburgo, aceptó con el ofrecimiento del apoyo militar de parte de Napoleón III., a pesar de existir un gobierno legítimo encabezado por Juárez.
La Intervención Francesa en México fue una guerra no solo Injusta y Deshonesta si no que a la vez fue Humillante y deshonrosa, en la que, la Ambición de Poder y de Riqueza fue vencida y rechazada por el Honor y la Gloria del Amor a la Patria de los buenos mexicanos, ya que durante mas de 3 años no hubieron ni vencedores ni vencidos y ninguno de ambos gobiernos podían ejercer sus funciones, hasta que brota la Guerra en Europa y Napoleón se vé obligado a retirar sus tropas de México, abandonando a Maximiliano que, a pesar de la intervención de Carlota, no pudo evitar este retiro.
Para esto, ya había surgido un Caudillo que en México estaba igualando las hazañas guerreras de Napoleón I, Tío del Emperador Napoleón III, y que perfilaba las posibilidades de triunfo a favor del Gobierno Mexicano, y que, batalla tras batalla, derrotaba a las tropas invasoras hasta que le pone sitio a la Ciudad de Puebla, reducto imperialista, y la toma por las Armas el 2 de Abril de 1,867, y con esta toma evita que Maximiliano pueda recibir tropas de apoyo en Querétaro en donde estaba sitiado por los Generales Mariano Escobedo y Ramón Corona, y luego de tomar Puebla, Porfirio Díaz alcanza en Calpulalpan al General Realista Leonardo Márquez y lo derrota el 4 de Abril de 1,867, obligando a Maximiliano rendirse junto con sus leales el 15 de Mayo de 1,867, fecha en que tanto el Segundo Emperador Mexicano del Siglo XIX, el último hasta la fecha, entrega su sable de mando al Gral.Escobedo y hacen lo mismo los Generales Miguel Miramón, Tomás Mejía y Ramón Méndez, que fueron juzgados por un tribunal militar que los condenó a ser fusilados lo que se ejecutó el 19 de Junio del año de 1,867, en el Cerro de las Campanas, en Querétaro, terminado de esta forma tan trágica la Intervención Francesa en México.
Por estas hazañas de Guerra en Pro de la Libertad , la Independencia y la Soberanía nacional, se considera al Gral. Don Porfirio Díaz Mory, como el Tercer Libertador de México y lo mantuvo en Paz durante los casi 35 años de sus gobiernos legítimos que alcanzaba en forma democrática y con el sufragio universal libre y secreto de los mexicanos. ¡Viva México!
1 comentario:
no encontre loq qria
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