Heberto Castillo
En su momento Heberto Castillo, uno de los líderes más pulcros de la izquierda mexicana, muy aparte de su actividad política, se le ha considerado como uno de los ingenieros constructores mexicanos más prolíficos e ingeniosos, tal es el caso de que a él se le debe la concepción estructural de la tridiloza y una re-concepción de los cimientos hidráulicos, por citar muy escasamente algunas de sus contribuciones, porque Heberto Castillo fue realmente prolífico en sus contribuciones arquitectónicas.
Su pecado
Por ser un líder izquierdista imbatible, incorruptible y un gran constructor, el priísmo de las décadas del 60 al 90, siempre lo tildó de “fundamentalista rojillo” e “ingeniero de poca monta”, para hacerlo ver y quedar mal ante los ojos de la sociedad.
Negro recuento
A la fecha llevamos la triste y lamentable cantidad de tres taxistas asesinados: el primero ultimado por lapidación, el segundo muerto por un grupo de pandilleros en un bosque cercano a el parque temático Ya’x Na’a y el último y triste caso es el del taxista que fue asaltado y apuñalado, quien todavía alcanzó llegar con vida hasta una estación de policía. En los dos primeros casos la Fiscalía Regional actúo de forma eficaz y expedita, “echándole el guante” rápidamente a los delincuentes en cuestión de horas, así como el caso del secuestro de un bebé.
Solo que sea por eso
Quizá por esto a Bonifacio Figueroa, quien ahora comparamos con Heberto Castillo, ya que sus detractores y quienes “apetecen” su destacado trabajo, constantemente intentan denostarlo y minimizarlo, sin embargo el amor, el dinero, el odio y el buen trabajo no se pueden ocultar, máxime si el buen trabajo es bueno, resulta imposible poderlo manchar.
El intento es opacarlo
Ante tales ataques por el cuidado y el esmero que a la ciudadanía ofrece, a más de que con intentos procaces, han tratado de que asuntos federales también sean de incumbencia y de su responsabilidad, pareciera ser que el propósito de las difamaciones “ordenas” tengan el propósito de castigar y encerrar a los que persiguen delincuentes, y a los delincuentes otorgarles medallas por atentar en contra de la ciudadanía.
Alcoholímetro
El programa del alcoholímetro debe de ser un programa que vaya encaminado el resguardo y prevención de la integridad de conductores y peatones, evitando el tránsito de chóferes en estado de ebriedad. Tal vez ese propósito se torció y solo fue objeto para el lucimiento publicitario y tal vez por esto mismo a partir del 19 de este mes el gobierno del estado tendrá a hora bajo su resguardo y dirección este programa que en su momento tuvo el ayuntamiento local.
A ver si ahora el propósito realmente se cumple.
En su momento Heberto Castillo, uno de los líderes más pulcros de la izquierda mexicana, muy aparte de su actividad política, se le ha considerado como uno de los ingenieros constructores mexicanos más prolíficos e ingeniosos, tal es el caso de que a él se le debe la concepción estructural de la tridiloza y una re-concepción de los cimientos hidráulicos, por citar muy escasamente algunas de sus contribuciones, porque Heberto Castillo fue realmente prolífico en sus contribuciones arquitectónicas.
Su pecado
Por ser un líder izquierdista imbatible, incorruptible y un gran constructor, el priísmo de las décadas del 60 al 90, siempre lo tildó de “fundamentalista rojillo” e “ingeniero de poca monta”, para hacerlo ver y quedar mal ante los ojos de la sociedad.
Negro recuento
A la fecha llevamos la triste y lamentable cantidad de tres taxistas asesinados: el primero ultimado por lapidación, el segundo muerto por un grupo de pandilleros en un bosque cercano a el parque temático Ya’x Na’a y el último y triste caso es el del taxista que fue asaltado y apuñalado, quien todavía alcanzó llegar con vida hasta una estación de policía. En los dos primeros casos la Fiscalía Regional actúo de forma eficaz y expedita, “echándole el guante” rápidamente a los delincuentes en cuestión de horas, así como el caso del secuestro de un bebé.
Solo que sea por eso
Quizá por esto a Bonifacio Figueroa, quien ahora comparamos con Heberto Castillo, ya que sus detractores y quienes “apetecen” su destacado trabajo, constantemente intentan denostarlo y minimizarlo, sin embargo el amor, el dinero, el odio y el buen trabajo no se pueden ocultar, máxime si el buen trabajo es bueno, resulta imposible poderlo manchar.
El intento es opacarlo
Ante tales ataques por el cuidado y el esmero que a la ciudadanía ofrece, a más de que con intentos procaces, han tratado de que asuntos federales también sean de incumbencia y de su responsabilidad, pareciera ser que el propósito de las difamaciones “ordenas” tengan el propósito de castigar y encerrar a los que persiguen delincuentes, y a los delincuentes otorgarles medallas por atentar en contra de la ciudadanía.
Alcoholímetro
El programa del alcoholímetro debe de ser un programa que vaya encaminado el resguardo y prevención de la integridad de conductores y peatones, evitando el tránsito de chóferes en estado de ebriedad. Tal vez ese propósito se torció y solo fue objeto para el lucimiento publicitario y tal vez por esto mismo a partir del 19 de este mes el gobierno del estado tendrá a hora bajo su resguardo y dirección este programa que en su momento tuvo el ayuntamiento local.
A ver si ahora el propósito realmente se cumple.
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