Comitán, Chis; 20 de julio.- La agresión y robo de su equipo de filmación por parte de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), al periodista Irineo Mújica Arzate, ya es investigada por el la CNDH, que inició una queja de oficio.
El organismo declara que dará seguimiento a la evolución de los hechos para “garantizar que el comunicador pueda hacer efectivos sus derechos fundamentales”.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dice que también investiga el desalojo que cometieron agentes de la Policía Municipal del Puebla, durante la manifestación pacífica que realizaba Mújica Arzate, frente a la estación migratoria de esa ciudad.
Pide que se garantice la integridad física del periodista Juan de Dios García Davish, que junto con Mújica Arzate, trabaja en la elaboración de un documental sobre migrantes “sin papeles”, durante su recorrido que realizan por México para llegar a la frontera con Estados Unidos.
“La CNDH inició una queja de oficio desde el momento que conoció de los hechos mediante una llamada telefónica, el pasado viernes 16, aproximadamente a las 18:50 horas, y gestionó de manera inmediata se proporcionara atención médica al agredido”, dice.
La agresión contra Mújica Arzate ocurrió en la comunidad San Antonio Xicotenco, en Soltepec, Puebla, durante un operativo para arrestar a los extranjeros que viajaban en el ferrocarril.
El comunicador iba en el tren y al percatarse del operativo empezó a filmar, “lo que ocasionó molestia en el personal del INM, que lo agredió físicamente y le quitó la cámara de video”.
Inmediatamente la CNDH pidió a la comandancia de la Policía Municipal de Soltepec, apoyo para el agraviado y atención médica de urgencia, para ser trasladado a una clínica ubicada en San Salvador El Seco.
Ya una vez dado de alto de la clínica, Irineo decidió manifestarse pacíficamente frente a las instalaciones del INM en Puebla, en pasado sábado por la tarde, pero fue retirado por agentes de la Policía Municipal, cuando llevaba dos horas frente a la estación migratoria.
“La Comisión Nacional de los Derechos Humanos asesoró al periodista para que obtuviera su libertad, lo que ocurrió en breve plazo y sin penalización debido a que el comunicador no cometió falta administrativa”, dice el organismo.
Y agrega que permanecerá atento a los hechos que sigan por este caso y en su “momento emitirá la resolución que conforme a derecho corresponda”.
El organismo declara que dará seguimiento a la evolución de los hechos para “garantizar que el comunicador pueda hacer efectivos sus derechos fundamentales”.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dice que también investiga el desalojo que cometieron agentes de la Policía Municipal del Puebla, durante la manifestación pacífica que realizaba Mújica Arzate, frente a la estación migratoria de esa ciudad.
Pide que se garantice la integridad física del periodista Juan de Dios García Davish, que junto con Mújica Arzate, trabaja en la elaboración de un documental sobre migrantes “sin papeles”, durante su recorrido que realizan por México para llegar a la frontera con Estados Unidos.
“La CNDH inició una queja de oficio desde el momento que conoció de los hechos mediante una llamada telefónica, el pasado viernes 16, aproximadamente a las 18:50 horas, y gestionó de manera inmediata se proporcionara atención médica al agredido”, dice.
La agresión contra Mújica Arzate ocurrió en la comunidad San Antonio Xicotenco, en Soltepec, Puebla, durante un operativo para arrestar a los extranjeros que viajaban en el ferrocarril.
El comunicador iba en el tren y al percatarse del operativo empezó a filmar, “lo que ocasionó molestia en el personal del INM, que lo agredió físicamente y le quitó la cámara de video”.
Inmediatamente la CNDH pidió a la comandancia de la Policía Municipal de Soltepec, apoyo para el agraviado y atención médica de urgencia, para ser trasladado a una clínica ubicada en San Salvador El Seco.
Ya una vez dado de alto de la clínica, Irineo decidió manifestarse pacíficamente frente a las instalaciones del INM en Puebla, en pasado sábado por la tarde, pero fue retirado por agentes de la Policía Municipal, cuando llevaba dos horas frente a la estación migratoria.
“La Comisión Nacional de los Derechos Humanos asesoró al periodista para que obtuviera su libertad, lo que ocurrió en breve plazo y sin penalización debido a que el comunicador no cometió falta administrativa”, dice el organismo.
Y agrega que permanecerá atento a los hechos que sigan por este caso y en su “momento emitirá la resolución que conforme a derecho corresponda”.
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