Bajín a la marmaja del gaseoso

Comitán; Chis. 22 de junio.- Tres hijos de la mala vida que llegaron con tremendas fuscas, hasta las oficinas del gas com, en donde encontraron muy tranquilo y comiendo moscas al tecolote que cuida la puerta, luego que le quitaron su matona y hasta su resortera 30 mm, le pegaron su susto a los trabajadores y al mero picudo de la ofecina, a quien le quitaron 100 mil chuchos de los finos.

El atraco fue ayer a las 6 de la tarde, en la hora en que ya taba bien entregadita toda la marmaja por los ruidosos trabajadores del Nufo Cordero, que hasta ya habían volteado sus bolsas como mollejas y que nada les quedaba, en las oficinas esas que están arriba de una tiendita que está en la esquina de la calle central Benito Camelo y el bulevar.

Después que doblaron y despistolaron al pitufo cuidador, se metieron estos tres jijos del maiz bien encabritados con sus dos pistolotas, porque el otro llevaba entre sus manos un Juan Gabriel, es decir iba armado con un puñalote, y les dijeron a todos que se tendieran como juncia en el suelo, en lo que le quitaban a Don Marcos Ramos 100 mil zopilotes mecos.

Ya que le habían quitado la paga al jefazo, no dejaron de asustar a los trabajadores con su escuadra y su revolver del llanero solitario, más el Juan Gabriel que llevaban, por lo que ya mero sentían los trabajadores que se les pelaba el agua de riñón del susto.

Y para no verse tan sospechudos estos tres ratones, llegaron sin calcetín en la carota y fue así como dejaron de rodillas al polecía de la entrada, y fue por eso que los meados trabajadores le dijeron a la ley como eran y que lunares tenían en su máscara.

Pero ni por esas, la cuicada pudo encontrar a estos hijos de Carlos Salinas de Gortari, que buscaron hasta debajo de los canastos de las eloteras, porque los muy cabrestos se pelaron a píe y rumbo al centro, como si estuvieran paseando.

Pero eso sí muy chentos y sintiéndose rambos, puntuales llegaron los de las camionetotas esas que transportan y cuidan la paguita, que lo único que se llevaron fue lo que Don Marcos Ramos les dio, cuando les dijo “tengasté”, esto fue lo que dejaron para ustedes.

Así fue como le quitaron por segunda vez, al pobre de Nufo Cordero, otro poco más de paga que estas vez fueron entre 100 y 200 mil morlacos, mas la fusca Bereta 9 mm que le quitaron al pitufo vigilante “Chilo” Sánchez Hernández, por lo que un emepe llegó a dar fe del los hechizos.