Nehemías Jiménez.Comitán, Chiapas; 3 de mayo.- Otro taxista fue blanco de la delincuencia. Esta vez, el trabajador del volante que cubría el turno nocturno, fue asaltado por sujetos desconocidos que lo amarraron con cinta canela y lo dejaron abandonado en un camino de extravío, cerca del Libramiento Norte de esta ciudad. Pese a la movilización de la Policía y de decenas de choferes que llegaron al área del asalto, los delincuentes huyeron hacia los matorrales.
Fue alrededor de la 1:00 de la madrugada que Manuel Calvo López, chofer del taxi 0127, un Nissan tipo Tsuru, con placas de circulación 91 24 BHD del estado de Chiapas, del sitio de taxis “Junchavín Plus” recogió a tres sujetos en la "zona de tolerancia", quienes le pidieron que los llevara al barrio de la Cruz Grande.
En el transcurso del camino los hombres desconocidos, comenzaron a golpear a Calvo López, a quien amarraron con cinta canela, en todo el cuerpo y rostro, para luego llevarlo en un camino de terracería, que se encuentra sobre la carretera en la salida a San Cristóbal, a unos cuantos metros del Libramiento Norte.
El taxi se encontraba intacto, pero los asaltantes únicamente tomaron el dinero que Calvó López, había ganado durante su turno y que asciende a poco más de 200 pesos, dijeron oficiales de la policía.
Los individuos bajaron al taxista y lo tiraron en un montarral, en donde sus compañeros lo hallaron luego de que se diera el aviso del asalto por medio de la frecuencia de radio de banda civil.
“¡Ayúdenme, ayúdenme!”, fue lo último que escucharon en la radio de Calvo López, según argumentaron sus compañeros de trabajo.
Los cuales rápidamente buscaron en las salidas de la ciudad, encontrando el taxi de Calvo López, estacionado a la orilla de la carretera que conduce a San Cristóbal, con las luces prendidas y los estacionarios, además de las llaves puestas.
A tan solo 5 metros encontraron a Manuel, quien débilmente gemía, el cual ya no podía respirar debido a la cinta canela con el que lo habían envuelto el rostro, tapándole la boca y nariz.
“Lo encontramos en shock; lo subimos al taxi de un compañero que se lo llevó al Hospital”, dijo un chofer del volante.
“Lo bueno es que no lo picaron con algún cuchillo”, dijo otro de sus compañeros en un tono de preocupación.
Luego de varios minutos decenas de taxistas que habían llegado al lugar, buscaban dentro de los matorrales a los asaltantes, que según dijeron huyeron en el monte con dirección hacia la ranchería Chacaljocom.
Al lugar también llegaron rápidamente agentes de la Policía Municipal, quienes también se unieron a la búsqueda.
Este es el primer asalto en lo que va del mes en curso, el cual se une a la larga lista que se ha contabilizado de ataques hacia los choferes de transporte que brindan el servicio de noche, en el cual uno perdió la vida, luego de que fuera atacado a “puñaladas y piedrazos” por sujetos que hasta el momento no han sido aprehendidos.
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