Amalia Avendaño
San Cristóbal, de Las Casas, Chiapas, 1 de diciembre.—El presidente municipal perredista de Zinacantán, Antonio Conde Vázquez, firmó un acuerdo con sus opositores de Nachig y otras comunidades del municipio, lo que abrió paso para que la madrugada de este martes fueran liberados ocho indígenas retenidos el domingo.
Según el acuerdo suscrito por las partes y por funcionarios del gobierno del estado, el síndico municipal, Manuel Hernández de la Cruz ---quien por diferencias políticas fue excluido del ayuntamiento desde finales de julio pasado, por Conde Vázquez--, y los regidores plurinominales priístas José Sánchez de la Cruz, Francisco Hernández Pérez, José Pérez y Pedro Montejo Hernández, “se comprometen a atender coordinadamente al grupo inconforme en la cabecera municipal”.
Las partes acordó también que las autoridades municipales pagarán 500 pesos mensuales por concepto de viáticos a los seis agentes municipales de Nachi, Shulvó y Jech Chentic, retroactivos al mes de mayo.
Acerca de las obras del ejercicio presupuestal 2009 ya programadas y que cuentan con el expediente técnico respectivo elaborado y autorizado en beneficio de Nachig, Shulvó y Jech Chentic, se acordó que se iniciarán los trabajos de inmediato, y deberán estar bajo la supervisión de Mariano Pérez Pérez, José Ruiz Vázquez y Pedro de la Cruz Pérez, agentes municipales de las comunidades citadas.
De igual forma se estableció que las autoridades municipales se comprometen a que la aplicación de los recursos económicos del ejercicio municipal 2010, se destinen exclusivamente a obras de beneficio social, y sin que se apoye únicamente a grupos que simpatizan con el alcalde.
Aunque durante un zafarrancho ocurrido el domingo por la noche en Nachig entre opositores y partidarios del alcalde hubo un templo y una casa quemados, así como varios vehículos dañados, este punto no fue abordado por los grupos.
De acuerdo con la información proporcionada a la prensa, los ocho indígenas partidarios de Conde Vázquez que estaban retenidos en la cárcel de Nachig, fueron liberados durante la madrugada de este martes.
Los indígenas fueron traídos a San Cristóbal por los integrantes de la comisión de gobierno que el lunes por la noche acudió a Nachig y a la cabecera municipal para buscar un arreglo entre las partes, que permitiera la liberación de los ocho zinacantecos.
Los ocho tzotziles fueron entregados en la Fiscalía de Justicia Indígena ubicada en San Cristóbal, donde más de 200 personas, familiares, amigos y compañeros, estaban en plantón para presionar a las autoridades con el fin de que los rescataran, independientemente de que habían interpuesto una demanda penal por el delito de privación ilegal de la libertad.
Con los acuerdos firmados aparentemente entra en un período de calma la situación de tensión que desde hace seis meses prevalece en Zinacantán por la disputa del poder político, entre dos grupos perredistas, uno de ellos apoyado por los priístas.
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