Chema recibe visita de su hermano

Amalia Avendaño.

Venustiano Carranza, Chiapas, 22 de octubre.--- A familiares, compañeros de lucha, amigos, activistas solidarios, gente indignada por aprehensión y prensa “honesta”, el líder histórico de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ), José Manuel Hernández Martínez, “Chema”, mandó su gratitud, sus saludos e informes de las condiciones en que permanece recluido en el penal de Nayarit.

El campesino quién fue detenido en su casa en el municipio de Carranza, e internado en el penal de El Amate, en Cintalapa el 28 de septiembre y 18 días después fue trasladado al Centro Federal de Readaptación Social número 04 de máxima seguridad, en Tepic, capital del estad de Nayarit, en el occidente del país, recibió este miércoles la visita de su hermano Fernando quién viajó desde Chiapas.

Luego de cumplir una serie de requisitos que vía internet les informaron en el penal que se exigían para ingresar a ver a su familiar, Fernando Hernández Martínez llegó hasta la puerta del CEFERESO y tampoco lo dejaron entrar porque, relata –“mis zapatos tenían agujetas, pero les dije que si querían me quitaba las agujetas o incluso hasta los zapatos les dejaba”.

La visita que es la primera que recibe “Chema” desde el 16 de octubre cuando lo internaron duró únicamente 45 minutos y cuando Fernando preguntó si podía regresar al día siguiente, le explicaron que no, porque los reos recién internados tienen derecho sólo 2 visitas, una de un familiar y una de su abogado durante los primeros 30 días, mientras se determina su “clasificación” como interno.

Compañeros de la OCEZ a quienes el hermano de su líder les “contó como le había ido” detallaron que “Chema” tiene buen ánimo, está tranquilo, físicamente se ve bien. Le dijo a Fernando que “por algo debe ser que estoy aquí”, pidió que la comunidad se mantenga unida y no se desanimen.

Mandó muchos saludos a todos los organismos solidarios nacionales e internacionales que han estado manifestándose por los diferentes medios para pedir su libertad y a los medios de comunicación “honestos”.

Explicó que tiene prohibido tener cualquier cosa que no le haya proporcionado el personal del CEFERESO, “ni siquiera una hoja de papel, ningún dinero, ni tarjeta de teléfono, nada” y que “tal vez” en unos ocho días le autoricen realizar una llamada por teléfono a un número “el que se acuerde porque no puede tener apuntado nada, así que seguramente será el de su casa”.

En el penal le informaron que si la familia quiere enviarle dinero a los internos, les proporcionarán una cuenta de banco donde pueden depositarle, pero únicamente tendrá acceso a 126 pesos a la semana para algún jabón o un panecillo algo de comer extra a los alimentos que se le proporcionan diariamente ahí.

Al preguntar si la razón de su traslado era alguna acusación por delitos federales, le informaron que existe un convenio entre el CEFERESO y gobiernos estatales para que sean enviados algunos reos que ha criterio de ellos deban permanecer en Nayarit, independientemente si los cargos son federales o del fuero común.