Ricardo RaveloMÉXICO, D.F. 13 de octubre (Apro).- Tres presuntos miembros del grupo delictivo Los Zetas, quienes responden a los nombres de Silverio Osorio López, Joel Díaz González y Juan Rocha Flores, fueron arraigados por un lapso de cuarenta días, en la ciudad de México.
Dichas personas fueron aprehendidas el pasado viernes 9 de octubre en Comalapa, Chiapas, por efectivos de la Policía Estatal Preventiva de esa entidad. El operativo y su captura se dio luego de que los presuntos narcotraficantes intentaron evadir un punto de revisión carretero. Posteriormente fueron trasladados de la Procuraduría local a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), donde fueron interrogados.
Al rendir su declaración ministerial, los inculpados manifestaron que trabajaban como sicarios y "halcones" (espías) en la organización criminal citada.
De acuerdo con las primeras investigaciones, la Fiscalía Especializada en Delincuencia organizada de Chiapas realizó varios cateos en la zona de influencia de Los Zetas dentro de territorio chiapaneco y aseguró un rancho que, según la PGR, funcionaba como casa de seguridad.
En ese sitio se localizaron, entre otras armas, 306 granadas 40 mm., 46 armas de de diferentes calibres, 22 carga morteros, cuatro cargas de explosivos, 17 mil 262 cartuchos de diferentes calibres, dos caballos y seis vehículos, uno de los cuales estaba blindado.
Zetas desertores del Ejército
Dentro del mapa criminal del narcotráfico, Chiapas es uno de los estados que, junto con Veracruz, Tabasco, Campeche, Tamaulipas y Nuevo León, están considerados como zonas de asiento del grupo armado Los Zetas.
Este grupo nació en 1997. Sus fundadores eran en su mayoría de extracción militar, desertores del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales del Ejército; desde ese año y hasta el 2003 Los Zetas operaban como escudo protector del cártel del Golfo y de su líder Osiel Cárdenas.
El capo cayó en desgracia en marzo de 2003: fue encarcelado en el penal de máxima seguridad de La Palma, donde permaneció cuatro años. En enero de 2007 fue extraditado a Estados Unidos.
Los Zetas, de acuerdo con información, tanto de la PGR, la SIEDO y la Secretaría de Seguridad Pública, operan en la actualidad como grupo independiente, aunque no se les registra en el mapa criminal propiamente como un cártel.
A Los Zetas, quienes se reforzaron con un buen número de exkaibiles (desertores del ejército de Guatemala) y en los años recientes con decenas de civiles, se les atribuyen unas 24 actividades delictivas que combinan con el tráfico de drogas.
Las autoridades federales enumeran las más trascendentes: extorsión, secuestro, trata de blancas, tráfico de órganos, narcotráfico, venta de protección.
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