Fredy Martín Pérez
Las Margaritas, Chis.— En el momento más álgido de la irrupción del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en los primeros meses de 1994, ‘Jacob’ conoció a los tres subcomandantes ‘Pedro’ o ‘Pedrín’ —como les llamaban las bases de apoyo—, ‘Daniel’ y ‘Marcos’.
De ellos, recuerda, el que más le fascinaba era el primero. “Con él comíamos juntos; si estábamos chaporreando, él venía a ayudarnos”, refiere.
Relata: ‘Pedrín’, caído en una confusa balacera en el auditorio municipal del ayuntamiento de Las Margaritas, en las primeras horas del 1 de enero de 1994, a manos del dirigente local de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Aarón Gordillo, cedió con su sacrificio un lugar preponderante en el EZLN a ‘Marcos’.
Ese día se dio a conocer que en Chiapas un grupo de indígenas y campesinos se habían levantado en armas contra el “mal gobierno”.
La prensa había quedado fascinada con el carisma del único ‘subcomandante’ que tendría el EZLN: ‘Marcos’.
‘Pedrín’ ya no tuvo tiempo de continuar en la madrugada del 1 de enero de hace 14 años, hacia Comitán, para tomar la plaza, la comandancia de la policía local y probablemente el 24 Regimiento de Caballería Motorizada.
‘Daniel’, el otro ‘subcomandante’ del EZLN, identificado por Carlos Tello como Salvador Morales Garibay, había desertado del grupo armado dos años atrás del levantamiento y al parecer huyó del país.
‘Jacob’, un antiguo militante del EZLN, reconoce el buen carácter del ‘subcomandante Pedro’, pero exalta el papel de ‘Marcos’, porque desde 1994 “no sólo no se ha ido, sino que ha estado aquí con nosotros viviendo la lucha”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario