Evangélicos rompen diálogo con el gobierno

Amalia Avendaño

San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, 9 de mayo.- Cansado de que “siempre los católicos se terminan burlando de nosotros”, los evangélicos de Mitzitón determinaron retirarse de la mesa de diálogo que en nueve años no ha funcionado por la “tibieza y complicidad” de operadores políticos que hacen quedar mal al gobernador Juan Sabines “quién si ha demostrado buena voluntad”, informó Esdras Alonso González.
El pastor evangélico agregó que las familias de esa comunidad indígena de San Cristóbal de Las Casas a quienes se les ha quitado hasta el derecho de enterrar a sus muertos “ya no creen en la negociación, llevamos nueve años dialogando y nunca se respetado lo que se acuerda, se siguen cometiendo ilícitos. Ya no queremos perder más tiempo”.
Consideró que el conflicto se mantiene por la “tibieza y complicidad de parte de algunos operadores políticos que trabajan en la región, porque a veces se ponen del lado de los católicos, y lejos de resolver el problema le dejan un gran paquete al gobernador que ha demostrado buena voluntad, pero los operadores políticos están lejos de darle buenos resultados”.
Aseguró que los católicos condicionan todo al dinero como pasó recientemente con la destrucción de las cercas de los evangélicos acusados de no participar en las cooperaciones comunitarias y cuando finalmente aceptaron dar 6 mil pesos por familia, los católicos agregaron más condiciones.

“Es una lástima que estemos mendingando que se respeten los derechos que la Constitución nos otorga”, expresó el líder religioso quién lamentó que de 15 averiguaciones previas que se han iniciado contra los católicos, se hayan archivado once en perjuicio de los evangélicos.
Anunció que retornaran a las negociaciones “cuando los caciques de Mitzitón hayan cesado todos los agravios contra los evangélicos y haya plena libertad religiosa…la ley no tiene por qué negociarse, si hay delitos que las autoridades correspondientes los persigan y sancionen” pero advirtió que “si la ley no garantiza la libertad religiosa se corre el riesgo de que haya violencia, y entonces sí, hasta que hay muertos las autoridades corren para resolver los problemas”.
En Mitzitón, localidad junto a Rancho Nuevo, en la carretera San Cristóbal-Comitán, más de 50 familias por profesar una religión distinta a la católica han sido despojadas de sus derechos agrarios, no se les permite construir un templo, tienen que enterrar a sus muertos en comunidades vecinas e incluso tienen prohibido cortar leña y constantemente son víctimas de hostigamientos, agresiones y amenazas con armas de fuego, “y no pasa nada, a veces delante de la polícia cometen agravios y no actúan”, denuncio Alonso González.