Gabriela Coutiño.
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Alrededor de 12 mil campesinos se manifestaron este miércoles en el estado de Chiapas, sureste de México, en protesta por la apertura comercial agropecuaria libre de aranceles, mediante el cual se libera la importación de maíz y frijol.
"El TLC se ha vuelto una pesadilla, lo que se vislumbra es que la pobreza podría criminalizarse al ponerse en riesgo la soberanía alimentaria y se espera un crecimiento de la delincuencia", dijo Carlos Alvarado Pereyda, dirigente de la Organización Nacional del Poder Popular (ONPP).
Con pancartas y gritando consignas en contra del gobierno, los campesinos e indígenas de las diferentes regiones de la entidad, advirtieron riesgos para el "empobrecido campo chiapaneco", con lo que dijeron, se vislumbra un éxodo drástico de la migración a Estados Unidos.
Carlos Alvarado, expuso que el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá en vigor desde el 1 de enero de 1994, el campo se ha ido acabando de manera paulatina.
En conferencia de prensa luego de marchar unos cinco kilómetros por las principales calles de esta ciudad, declaró que la apertura comercial "es un mal regalo y mensaje de año nuevo por parte del gobierno federal para el campesinado".
"En la actualidad suman más de 300 mil los chiapanecos que han cruzado la frontera norte de México en busca de mejores condiciones de bienestar, lo cual se refleja en una captación de divisas por 650 millones de dólares anuales, y con eso los compañeros campesinos han estado sobreviviendo estos años", dijo.
Señaló que a partir del primero de enero del 2008 el futuro es incierto para el campo de Chiapas, "lo urgente es que se modifiquen las políticas a
gropecuarias del gobierno federal y estatal para establecer medidas que permitan rescatar al campo de la pobreza, que se destine un financiamiento justo", destacó.
Dijo que los programas que incentiven la producción de cultivos orgánicos en el estado no se ve como una solución, en cambio la entrada de transgénicos pueden constituir un riesgo.
Los campesinos se manifestaron también en contra del aumento paulatino al precio de la gasolina, pasaje, gas, energía eléctrica, aceite, tortilla y leche, "con eso, el pronóstico es que cada vez más habrá tierras de cultivos abandonadas y un avasallamiento del maíz extranjero", dijo uno de los manifestantes.
De los programas del gobierno como Procampo y Alianza para el campo, dijeron que solos son "paliativos".
Los campesinos advirtieron que las manifestaciones en contra de la apertura comercial agropecuaria se mantendrán. Aspiran a que el acuerdo comercial se suspenda.
Indicaron que las organizaciones campesinas mantendrán la lucha por la tierra, la defensa de los recursos naturales, la democracia, la justicia social, mientras haya incertidumbre y pobreza en el campo, estará latente el riesgo de una inconformidad social de lamentables consecuencias.
Durante la marcha y mitin en el centro de Tuxtla Gutiérrez, los campesinos fueron escoltados por las policías estatales y municipales, en tanto en el exterior de palacio de gobierno uniformados sin armas y sin tolete se mantuvieron a la expectativa observando la manifestación.
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Alrededor de 12 mil campesinos se manifestaron este miércoles en el estado de Chiapas, sureste de México, en protesta por la apertura comercial agropecuaria libre de aranceles, mediante el cual se libera la importación de maíz y frijol.
"El TLC se ha vuelto una pesadilla, lo que se vislumbra es que la pobreza podría criminalizarse al ponerse en riesgo la soberanía alimentaria y se espera un crecimiento de la delincuencia", dijo Carlos Alvarado Pereyda, dirigente de la Organización Nacional del Poder Popular (ONPP).
Con pancartas y gritando consignas en contra del gobierno, los campesinos e indígenas de las diferentes regiones de la entidad, advirtieron riesgos para el "empobrecido campo chiapaneco", con lo que dijeron, se vislumbra un éxodo drástico de la migración a Estados Unidos.
Carlos Alvarado, expuso que el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá en vigor desde el 1 de enero de 1994, el campo se ha ido acabando de manera paulatina.
En conferencia de prensa luego de marchar unos cinco kilómetros por las principales calles de esta ciudad, declaró que la apertura comercial "es un mal regalo y mensaje de año nuevo por parte del gobierno federal para el campesinado".
"En la actualidad suman más de 300 mil los chiapanecos que han cruzado la frontera norte de México en busca de mejores condiciones de bienestar, lo cual se refleja en una captación de divisas por 650 millones de dólares anuales, y con eso los compañeros campesinos han estado sobreviviendo estos años", dijo.
Señaló que a partir del primero de enero del 2008 el futuro es incierto para el campo de Chiapas, "lo urgente es que se modifiquen las políticas a
gropecuarias del gobierno federal y estatal para establecer medidas que permitan rescatar al campo de la pobreza, que se destine un financiamiento justo", destacó.Dijo que los programas que incentiven la producción de cultivos orgánicos en el estado no se ve como una solución, en cambio la entrada de transgénicos pueden constituir un riesgo.
Los campesinos se manifestaron también en contra del aumento paulatino al precio de la gasolina, pasaje, gas, energía eléctrica, aceite, tortilla y leche, "con eso, el pronóstico es que cada vez más habrá tierras de cultivos abandonadas y un avasallamiento del maíz extranjero", dijo uno de los manifestantes.
De los programas del gobierno como Procampo y Alianza para el campo, dijeron que solos son "paliativos".
Los campesinos advirtieron que las manifestaciones en contra de la apertura comercial agropecuaria se mantendrán. Aspiran a que el acuerdo comercial se suspenda.
Indicaron que las organizaciones campesinas mantendrán la lucha por la tierra, la defensa de los recursos naturales, la democracia, la justicia social, mientras haya incertidumbre y pobreza en el campo, estará latente el riesgo de una inconformidad social de lamentables consecuencias.
Durante la marcha y mitin en el centro de Tuxtla Gutiérrez, los campesinos fueron escoltados por las policías estatales y municipales, en tanto en el exterior de palacio de gobierno uniformados sin armas y sin tolete se mantuvieron a la expectativa observando la manifestación.
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