Isaín Flores L.
Berriozábal, Chis., 5 de noviembre.- Este es uno de los municipios más castigados por las lluvias que han azotado el estado desde el 8 de octubre, Benito Quesada, El Divisadero y Las Camelias son comunidades que están bajo el agua.
Berriozábal, Chis., 5 de noviembre.- Este es uno de los municipios más castigados por las lluvias que han azotado el estado desde el 8 de octubre, Benito Quesada, El Divisadero y Las Camelias son comunidades que están bajo el agua.
Sus habitantes, cerca de 300 personas se encuentran en albergues en la cabecera municipal, la víspera ingresaron otras 44, sin embargo, la gran mayoría de sus comunidades se encuentran incomunicadas por derrumbes en las carreteras.
No es posible llegar vía terrestre por derrumbes, asentamientos y deslaves en los caminos a las localidades Paso Limón, Benito Juárez, Danubio, Buena Vista, Ignacio Zaragoza, Jacacal, Nuevo Progreso, Nuevo el Triunfo, Monte Cristo, Las Maravillas, Río Blanco, Joaquín Miguel Gutiérrez y El Limón.
Otra comunidad de la zona drásticamente afectada por derrumbes en su acceso por este municipio es El Edén, municipio de Tecpatán, integrada por unas 110 familias que laman ayuda.
Desde el 8 de octubre, un día después de la elección de miembros de ayuntamiento y diputados locales, comenzó la etapa más fuete de lluvias, con ello se desbordó el río "La Fabrica", incrementó su caudal destruyó un puente de hamaca y arrastró a una persona cuyo cuerpo aun no es localizado, reportó el presidente municipal priista Hernán Mancilla López.Nadie daba crédito a lo que pasaba en este municipio debido a que históricamente sufre de la escasez de agua, el ayuntamiento municipal tiene que llevar el recurso natural a los hogares en la cabecera municipal como en las rurales, pero en esta ocasión la naturaleza les dio de más.
En la zona se perdió la producción, principalmente de maíz, plátano y chayote, que es lo que predomina, la gente de enfrentaba una crisis económica, pero ahora su futuro es incierto y aún no asimila lo pasado, ni lo que viene.
El munícipe reconoció el apoyo de la federación y del gobierno del estado para sostener a los albergues y garantizar el abasto alimentario de los damnificados, pues se ha tenido que establecer un puente aéreo para llegar a las zonas rurales donde los caminos están destrozados.
Las iglesias y la sociedad en general que no fue damnificada se han sumado con sus aportaciones, pero necesitamos mucha más ayuda, agua, jabón, pastas, galletas, frijol, arroz, medicinas, ropa, alimentos no perecederos, y todo lo que pueda ser útil, dijo el munícipe.
El Sistema Municipal de Protección Civil trabaja en la elaboración de un diagnóstico de daños a viviendas, muchas casas fueron destruidas, otras presentan daños parciales, algunas ya no serán habitables, cerca de mil fueron afectadas.
El alcalde reconoce que los fuertes escurrimientos y el desbordamiento de ríos es consecuencia del acelerado proceso de deterioro de los ecosistemas, la pérdida de bosques no se ha logrado detener.
Los lugareños esperan mucho de los tres niveles de gobierno, sobre todo de la federación, para recuperar parte de lo que han perdido, sobre todo su casa, como comenta doña Amelia López López, que ha tenido que refugiarse en el albergue de la cabecera municipal porque el agua en Las Camelias, entró a su casa.




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