María de Jesús Peters
ARRIAGA, Chis., 26 de julio.- Tres personas que portaban armas de fuego asaltaron a un grupo de migrantes centroamericanos y abusaron sexualmente de una niña hondureña de 13 años de edad, denunció el párroco de la casa del migrantes, Heyman Vázquez Medina.
Los hechos se registraron a las 13:00 horas, a la altura del basurero, que se ubica a unos seis kilómetros de esta demarcación que limita con el estado de Oaxaca, cuando tres sujetos de manera violenta despojaron de sus pertenecías al grupo de inmigrantes y atacaron sexualmente a la menor, originaria de la comunidad Urraca, perteneciente al departamento de Progreso Yoro, Honduras.
La niña viajaba en compañía de su hermano Neptalí Gómez Sarmiento, de 26 años de edad, así como de seis inmigrantes de Guatemala, El Salvador y Honduras, quienes transitaban por un camino de extravío para evitar ser detenidos por las autoridades migratorias.
Vázquez Medina indicó que la menor se encuentra afectada psicológicamente, sin embargo decidieron continuar con su viaje a los Estados Unidos a bordo del ferrocarril.
El sacerdote lamentó que las autoridades mexicanas continúen permitiendo que delincuentes sigan aprovechándose de la situación vulnerable de los niños migrantes centroamericanos y no hagan nada para evitar las vejaciones y abusos.
“Pero es más triste que los cónsules no se interesen en el dolor de sus connacionales, no cumplen con su obligación de vigilar, cuidar y ayudar a pesar de que es su obligación, de que perciben un salario por eso”, aseveró el
El clérigo señaló que en reiteradas ocasiones ha buscados al cónsul de Honduras y Guatemala para informarles sobre las vejaciones y abusos que sufren sus connacionales, pero no han atendido el llamado.
“Se les ha invitado para que hagan un recorrido y conozcan la ruta por donde transitan sus connacionales, pero pareciera ser que no les importa y el caso de la niña es un ejemplo “, indicó.
El coordinador de la casa del migrante en esta localidad, ubicada a unos 265 kilómetros de Tapachula, demandó al gobierno de Honduras que designe a personas que realmente se interesen por sus connacionales.
ARRIAGA, Chis., 26 de julio.- Tres personas que portaban armas de fuego asaltaron a un grupo de migrantes centroamericanos y abusaron sexualmente de una niña hondureña de 13 años de edad, denunció el párroco de la casa del migrantes, Heyman Vázquez Medina.
Los hechos se registraron a las 13:00 horas, a la altura del basurero, que se ubica a unos seis kilómetros de esta demarcación que limita con el estado de Oaxaca, cuando tres sujetos de manera violenta despojaron de sus pertenecías al grupo de inmigrantes y atacaron sexualmente a la menor, originaria de la comunidad Urraca, perteneciente al departamento de Progreso Yoro, Honduras.
La niña viajaba en compañía de su hermano Neptalí Gómez Sarmiento, de 26 años de edad, así como de seis inmigrantes de Guatemala, El Salvador y Honduras, quienes transitaban por un camino de extravío para evitar ser detenidos por las autoridades migratorias.
Vázquez Medina indicó que la menor se encuentra afectada psicológicamente, sin embargo decidieron continuar con su viaje a los Estados Unidos a bordo del ferrocarril.
El sacerdote lamentó que las autoridades mexicanas continúen permitiendo que delincuentes sigan aprovechándose de la situación vulnerable de los niños migrantes centroamericanos y no hagan nada para evitar las vejaciones y abusos.
“Pero es más triste que los cónsules no se interesen en el dolor de sus connacionales, no cumplen con su obligación de vigilar, cuidar y ayudar a pesar de que es su obligación, de que perciben un salario por eso”, aseveró el
El clérigo señaló que en reiteradas ocasiones ha buscados al cónsul de Honduras y Guatemala para informarles sobre las vejaciones y abusos que sufren sus connacionales, pero no han atendido el llamado.
“Se les ha invitado para que hagan un recorrido y conozcan la ruta por donde transitan sus connacionales, pero pareciera ser que no les importa y el caso de la niña es un ejemplo “, indicó.
El coordinador de la casa del migrante en esta localidad, ubicada a unos 265 kilómetros de Tapachula, demandó al gobierno de Honduras que designe a personas que realmente se interesen por sus connacionales.
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