miércoles, julio 18, 2007

Retienen a autoridades indígenas de Chamula y Chalchihuitán

Carlos Herrera

San Cristóbal de Las Casas, Chis; 17 de julio.- La falta de construcción de obras y la palabra inclumplida de autoridades de gobierno, es “castigada” con retención, golpes e incluso hasta cárcel en comunidades indígenas de Chiapas, como una forma de aplicar sus usos y costumbres.
En el caso más reciente, habitantes de la comunidad indígena de Emiliano Zapata, retuvieron y amarraron durante ocho horas al alcalde del municipio de Chalchihuitán, Antonio Pérez Gómez, en protesta por la supuesta cancelación de obras sociales.
Reportes policíacos indican que el edil, de extracción priista, fue retenido a las seis de la mañana del lunes en la cabecera municipal de Chalchihuitán, en la región Altos de Chiapas, junto con el síndico municipal –cuyo nombre no fue proporcionado- y llevado amarrado a la localidad de Emiliano Zapata por más de medio centenar de indígenas inconformes.
Explicaron que al llegar al poblado, cientos de pobladores comenzaron a cuestionar al edil por la presunta suspensión de la construcción de las obras (una cancha deportiva y un aula). Y es que en dichas localidades de Chiapas se acostumbra castigar de esa forma a las autoridades cuando no cumplen sus promesas.
Después de ocho horas se aclaró que había una “confusión” en la información que días antes les había dado el director de obras públicas del municipio, cuyo nombre tampoco fue dado a conocer. De esta forma, alrededor de las 14 horas fueron liberados el alcalde y el síndico, luego de firmarse un documento en el que Antonio Pérez Gómez se comprometió a construir la cancha y el aula. Ambos funcionarios regresaron a la cabecera municipal y ordenaron el encarcelamiento por 24 horas del director de obras públicas en castigo por haber proporcionado mal la información a los habitantes de Emiliano Zapata. Las fuentes informaron que este martes las autoridades municipales realizarían una reunión para analizar el caso del funcionario y si lo destituyen por haber causado el problema. En otro caso, el síndico del concejo municipal de San Juan Chamula, Pascual Sántiz Díaz, fue retenido en la presidencia de ese lugar el pasado domingo por decenas de indígenas. Los pobladores de Arvenza 1, Ucuntic y Bautista Grande, llegaron hasta la oficina del síndico para reclamarle la falta de construcción de obras. Los indígenas amenazaron con no dejarlo salir hasta que les dijera cuándo les daría los recursos económicos para las mismas. Sántiz Díaz les respondió que ese era problema de Domingo Sántis López, alcalde constitucional destituido mediante plebiscito el 19 de noviembre pasado y que ya no se mantiene en Chamula, despecha desde una oficina en San Cristóbal de Las Casas.
Después de cerca de una hora de discusiones, el síndico municipal pudo salir de su oficina tras prometer a los chamulas que los atendería a su regreso de una peregrinación de la virgen del Carmen que se realizaría en San Cristóbal. Ya estando en San Cristóbal, Pascual Sántiz Díaz pidió a las autoridades estatales que aplicaran la ley y castigaran a los indígenas que lo retuvieron, además de que se le proporcione seguridad personal, lo cual le fue negado. El síndico municipal rechazó la propuesta de los inconformes en el sentido de que se instale una mesa de negociaciones, con el argumento de que “son perredistas” y que el problema es con Domingo Sántiz.
El síndico ya no regresó al palacio municipal de Chamula, donde se supone había dejado esperando a los indígenas que lo retuvieron. Y éstos, por su parte, acordaron regresar el próximo domingo para realizar una asamblea y exigirle la construcción de las obras ofrecidas.

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