lunes, mayo 07, 2007




Temor por ejecución de Luis Manuel Córdova Ochoa

Fredy Martín Pérez.

Comitán, Chis.- Después de la ejecución del segundo inspector de la Policía Estatal Preventiva (PEP), Luis Manuel Córdova Ochoa, cercano colaborador del Secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Horacio Schroeder Bejarano, grupos policíacos temen que persistan con su ajuste de cuentas.
La tensión entre los mandos medios de la PEP persistía y muchos de ellos, que estuvieron cerca del ex teniente de infantería, manifestaron su temor que los sicarios continúen con el ajuste de cuentas.
El sábado hacia la 01:00 de la madrugada, Córdova Ochoa, de 35 años de edad y comandante de la PEP, en Comitán, fue ejecutado por varios sicarios cuando circulaba a bordo de su camioneta de lujo sobre la avenida central oriente, entre primera y segunda sur, en el centro de Tapachula.
Los sicarios que usaron armas Ak-47, conocidas entre los narcotraficantes como “Cuernos de chivo”, habrían disparado hasta 40 proyectiles hacia el vehículo una camioneta Dodge Ram, doble cabina, color gris y placas de circulación CZ-17502, con placas del estado de Chiapas.
El jefe policiaco estatal, que estuvo en la plaza de Comitán, por un año, perdió la vida por los disparos.
Hasta 20 impactos recibió Córdova Ochoa, en el pómulo, parietal, oreja, cuello, axila y codo superior del lado izquierdo, por donde los agresores descargaron principalmente sus armas, según informó la Fiscalía de Justicia del Estado.
La camioneta de lujo presentaba hasta once impactos de entrada principalmente en el lado izquierdo, pero también hay disparos en el lado derecho de lado del copiloto.
Córdova Ochoa había viajado a Tapachula el viernes para visitar a sus hijas que procreó con la comunicadora Eloisa Díaz Arriaga.
Sin embargo, como siempre lo hacía, decidió ir a Tapachula manejando su vehículo y sin escolta, la que siempre usaba cuando se trasladaba a Tuxtla Gutiérrez, para atender asuntos con Schroeder Bejarano o para participar en algunas operaciones.
Incluso, su arma larga la dejó en las oficinas de la corporación, pero no así su escuadra calibre 9 milímetros que llevaba en la cintura.
Cuando lo sicarios lo ejecutaron, no le dieron tiempo de accionar su pistola.
Las primeras investigaciones revelan que los agresores del jefe policiaco los conocía porque presuntamente le abrían pedido que se detuviera.
Fue entonces que se estacionó cerca de la negociación “Tortas Popeye”, que para esas horas, ya estaba cerrada.
En ese instante Córdova Ochoa detuvo su vehículo, sin apagar el motor, como si platicaría con ellos, pero justo en ese momento, los sicarios accionaron los “Cuernos de chivo”.
Temor
La ejecución del comandante y segundo inspector de la PEP corrió como reguero de pólvora en Comitán, donde había llegado a sustituir a Xicotencatl Albores Albores hace un año.
Sus más cercanos colabores y mandos medios de la corporación vieron con azoro los hechos.
Y algunos de ellos manifestaron su temor de que los sicarios continúen realizando ejecuciones en su contra.
Sin revelar sus nombres, los agentes desestimaron las declaraciones de funcionarios del gobierno del estado, que han dicho que el homicidio de Córdova Ochoa no está relacionado con su trabajo, pero ellos dijeron que si se debió a su quehacer.
Lo que no entienden los mandos medios de la PEP y Secretaría Sectorial por qué su jefe fue asesinado en Tapachula y no en la región fronteriza donde tenía su principal centro de operaciones.
El domingo hacia las 13:30 horas, un oficial de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y otro de la Policía Sectorial ingresaron al departamento que tenía Córdova Ochoa, en la 5ª norte poniente, a unos metros de la Cruz Roja Mexicana.
La acción es como parte de las pesquisas que realiza la Fiscalía de Justicia del Estado como parte de la averiguación previa 326/1ª/2007 que se inició por el delito de homicidio y los que resulten en agravio de Córdova Ochoa.

2 comentarios:

No dijo...

El es mi papá, fue una persona con mucho carácter, aun no entiendo la maldad de querer arrebatarle la vida a una persona, su mayor anelo era ver a sus hijas crecer E y S, son mis medias hermanas quisiera conocerlas pero no se si sepan de mi existencia, antes de que falleciera Córdova ya había dejado un pedazo de él (yo), actualmente tengo 17 años los mismos años que paso esta terrible noticia, espero pronto pueda conocer a mis hermanas, si llegan a leer esto no duden en buscarme, Córdova Ochoa siempre en nuestros corazones 🤍

Sarah Monserrat dijo...

Búscame, soy su hija y ni idea de tu existencia. 9625145927